Informes Especiales · 20 de Abril de 2018
LNB ·
#LeyendasDeLiga: los 100 mejores
Julián Mozo, columnista de la Liga Nacional, se animó a armar el Top 100 de jugadores nacionales en la historia de la La Liga. En esta nota te desgrana los criterios que tuvo en cuenta para armar un ranking que contó con una profunda investigación, más allá de las apreciaciones personales del autor. Cada día se conocerán diez elegidos (con su fundamentación) hasta llegar al N° 1. Un trabajo que permite recordar, homenajear, analizar y debatir.
Por Julián Mozo
La idea siempre había estado en la cabeza al ver los rankings, actuales e históricos, que hacen los portales que cubren la NBA. ¿Por qué no hacerlo con la Liga?, era la pregunta recurrente. Quizá faltaba el empujón final, el que terminó dando el sitio Mundo D cuando decidió armar un listado con los 100 mejores jugadores de la historia La Liga, gracias a un esforzado trabajo de los periodistas Marcelo Chaijale, Jorge Arrieta y Sebastián Roggero. La motivación de esa publicación aceleró el proceso de armar una lista propia, aunque con la diferencia de que sea sólo de nacionales (sin extranjeros, que sentía no podían ser comparados con los argentinos por distintos motivos). Fueron 45 días a full, de activar la memoria, de hacer una profunda investigación (en guías oficiales, libros y en toda la web) y de consultar a colegas con más años en la profesión (sobre todo para volver a “vivir” las tres primeras LNB). Recordar, buscar, analizar, debatir, comparar, pensar y volver a pensar. Así, día a día, hasta lograr dar a luz este Top 100 que no hace más que reflejar lo grande que ha sido la Liga Nacional en estos primeros 34 años, desde aquella Liga de Transición en 1984.
La idea fue armar este ranking con criterios definidos para que cada uno de ustedes sepa claramente cuáles son los parámetros que se utilizaron porque esto no es un juego. Es más bien un trabajo exhaustivo que busca, dentro de la subjetividad de este autor (aclaración clave), ser lo más riguroso posible. Seguramente hay cuestiones personales, de gustos, pero siempre estuvo la búsqueda de minimizarlas… El objetivo no fue construir este listado de acuerdo a los jugadores que gustaron más, porque eso sería demasiado arbitrario y no aporta a la consideración general. Ni siquiera se armó pensando en quiénes jugaron mejor. O al menos no sólo en eso. No es un ranking de juego. El nivel mostrado fue muy importante, sin dudas, pero hay otras cuestiones que se tuvieron en cuenta. Quizá la fórmula que mejor refleja el combo usado fue la relación entre el tiempo que jugó, lo bien que lo hizo, cuán importante fue en sus equipos y el contexto de las ligas que disputó. Cuándo (y cuántos años) jugaron bien esos jugadores, en qué equipos (no es igual si se destacaron en campeones, candidatos o clubes más humildes, por ejemplo) y con qué roles (superestrellas, figuras u obreros). También sumó mucho para cada causa cuánto ganó ese jugador (hablamos títulos y sus distintos valores) y, en menor medida, premios y récords conseguidos a lo largo de su carrera en esta competencia.
Eso sí, ante la paridad de varios rubros, se privilegiaron argumentos de apreciación de este autor. Por caso, jugadores que fueron determinantes, aunque sea por pocos años,resultaron privilegiados. Así sucedió con los casos de Campazzo, Oberto, Deck y Racca, entre otros. Todos dominantes en poco tiempo. Aunque, claro, todo tiene un límite. Hay que ver hasta dónde cada uno sube (en el ránking) porque el problema es cuando empieza la comparación con aquellos que jugaron muy bien (sin ser decisivos) durante mucho más tiempo. Por ejemplo, el de Emanuel Ginóbili, que jugó sólo tres temporadas, es un caso testigo. Y polémico. En la primera fue revelación, en otra se destacó y en la última la rompió. Todo con 18/21 años. Manu, entonces, ¿es para la LNB más o menos que Sepo, su hermano, que jugó mucho más tiempo (y logró más cosas) pero nunca alcanzó el nivel de su hermanito? ¿Y que Matías Sandes, que fue un rol valioso en varios campeones pero nunca brilló en una temporada como MG en su tercera? Difícil, muy difícil. Y subjetivo, por supuesto.
Otro punto decisivo para aclarar es que el listado se armó por lo que cada uno hizo en la Liga Nacional, no en su carrera como basquetbolista. Por eso hay cracks mundiales, como Ginóbili, Nocioni o Pepe Sánchez, en lugares no tan destacados para lo que fueron sus trayectorias. Jugaron muy bien en la LNB, sí, pero pooc tiempo y no al nivel del resto de su carrera. O figuras de otra época, como Raffaelli o Cadillac, que jugaron bien en la Liga, pero lo mejor lo mostraron en los años previos a la creación de La Liga. Por último, hubo un mínimo de tiempo de permanencia para ser tenido en cuenta para este Top 100: el jugador debió haber disputado al menos 3 temporadas.
Cada puesto se analizó a fondo. Y se comparó con los ubicados antes y después. Habrá diferencias con varios de ustedes, porque existen cuestiones de apreciación (cuán bueno fue tal o cual, cuán importante resultó en tal equipo y cuán valorado resultó en un contexto puntual de la LNB) que son muy difícil de acordar, pero nada se hizo con liviandad. Y nada fue fácil. Ni siquiera elegir al 1° de la historia. Por ejemplo, en este caso, hubo tres nombres que en mi mente pelearon hasta el segundo final. Cualquiera pudo llevarse el título de “mejor de la historia”, realmente. En mis borradores primero puse como el N° 1 a Milanesio, luego a Pichi Campana y terminé inclinándome por Leo Gutiérrez. Así de difícil fue. Es muy probable que Campana y Milanesio hayan sido mejores jugadores y más ídolos, pero Leo ganó como nadie (10 LNB en 23 disputadas) y en distintos equipos, cinco en total. En cuatro de ellos fue la superestrella, el que los hizo ganar. Durante una década si no tenías a Leo, no ganabas. Así de simple (y contundente) fue. Marcelo y Pichi resultaron increíbles, en una época dorada (mejor que la de Leo), pero jugaron (y ganaron) juntos. Leo no tuvo tan jerarquizados compañeros como ellos y eso cuenta. Lo de Campana también fue épico en diversos clubes, recuperándose de lesiones durísimas y cambiando su juego para seguir siendo productivo con el paso de tiempo. Pero ninguno mejoró tanto como Leo, que pasó de ser obrero a una estrella con un tiro devastador. A Milanesio, un crack con estilo único que combinaba conducción con anotación, es el ícono de la LNB y lo acompaña un componente romántico, un velo muy fuerte de idolatría. Marcó a generaciones y es el máximo ícono cordobés. Lo merecía. Como Pichi. Y como Leo.
No resultó sencillo, tampoco, comparar jugadores de distintas épocas. Por dos cosas además de la lógica dificultad: primero porque hubo que analizar en qué épocas la LNB fue más o menos poderosa. No fue lo mismo brillar entre 1995 y 1998, quizá la mejor etapa, que luego de la crisis económica del 2001, cuando había menos y peores extranjeros, por caso. Y segundo, porque uno tiende a creer lo pasado fue mejor y, en realidad, hay jugadores actuales que, cuando uno se detiene a analizar, no fueron menos que varios históricos. También, además de los complejos que uno puede tener, hubo que luchar contra la memoria. La propia. Fue habitual pensar en un jugador y rápidamente tener un concepto sobre él que tal vez se potenciaba o minimizaba a la hora de buscar otros argumentos, como números y títulos, o de recordar partidos, situaciones y momentos de esos jugadores.
Incluso se dio pelea contra los estereotipos y se evaluó el mayor o menor “marketing o prensa” –como se dice en la tribuna- que han arrastrado ciertos jugadores. Marcos Mata es un ejemplo. Alguien sin los números o el nombre de otros cracks, pero con el enorme respeto y valoración de compañeros y técnicos. Acá no cuenta cómo jugó en la Selección, sí que fue pieza decisiva del Peña tricampeón y del San Lorenzo bicampeón. Hablamos de nada menos que el sexto jugador más ganador de la historia. ¿Cómo no va a estar bien arriba en la consideración? El caso de Martín Leiva es otro. Jugador nada vistoso, pero determinante en seis campeones de la LNB. Quizás mucho de ustedes crean que el Loco Montenegro fue mejor jugador. Y posiblemente lo fue. ¿Pero quién hizo más en la LNB? Todo un debate. El juego y la calidad, como verán, no es lo único que se consideró y por eso será normal que vean jugadores por encima de otros que tal vez, en calidad, eran mejores o más vistosos… En este apartado, entonces, hubo además que pelear con los gustos propios. Tal vez a este autor algunos no le gustaban tanto cómo jugaban, pero ¿cómo no valorarlos o incluso poder ponerlos por encima de otros que gustaban más, si realmente hicieron cosas más trascendentes y valiosas?
Así, con estos parámetros, se armó el Top 100, sin pretensiones de dar verdaderas reveladas ni sentencias absolutas. Sólo con la idea de recordar, homenajear, opinar, analizar y debatir entre todos los amantes de nuestra amada Liga Nacional.
#LEYENDASDELIGA
TOP 100: Puesto 100° al 91°
100-Marcelo Duffy: Ala pivote bajo, fuerte, de carácter, muy buen defensor y con buenos aportes ofensivos. Arrancó muy bien en River, del 85 al 87, sus mejores producciones las tuvo en Gimnasia de Pergamino (promedió 22.6 pts y 8.4 rebotes en el 88) y las últimas cuatro campañas fueron en Olimpia de Venado, la 91/92 resultó la última con protagonismo.
99-Nicolás De los Santos: Suma 13 temporadas en la LNB (10 en Comodoro, en tres etapas: 04/07, 08/10 y 13/17) y, por su madurez, desde hace cuatro años en uno de los mejores bases de la competencia. Con Gimnasia fue clave en la conquista del subcampeonato de Liga en el 2015 y del Súper 4 en el 2014. Integraba el equipo pero jugaba muy poco en el título de Comodoro en el 2006.
98-Sebastián Acosta: Controvertido jugador el Negro. Jugó 13 temporadas en las que mostró las dos caras, problemas fuera de la cancha y de indisciplina, pero adentro exhibió personalidad, talento físico y capacidad anotadora. En sus últimas ocho campañas estuvo por encima de los 10 pts de promedio, tocando techo en la 2004/2005 con 18.2. Fue elegido el mejor escolta en la 2007/2008. Integró el Boca campeón de 1997 (no jugaba), la Sudamericana 2002 con Libertad y el Súper 8 del 2008 con Regatas.
97-Luis Cequeira: Base muy veloz, con tremenda potencia de piernas, que fue mejorando en la toma de decisiones, aunque le costó pulir el tiro (30% triples en su carrera). Junior, chaqueño surgido de Quilmes, tiene cuatro títulos, la LNB con Boca en el 2007 (fue Mejor Sexto Hombre), dos Copas Argentina con el Xeneize y el Súper 8 del 2008 con Regatas. A nivel internacional, dos Sudamericanos (Boca) y un Interligas (Obras). Su muy buen nivel en LNB lo llevó a la Selección. Sigue activo, en su 17a campaña.
96-Luis González: Pivote enorme (2m10) que amenazó con ser el interno que Argentina necesitaba en los 80 pero se quedó en promesas. Igual, en la LNB fue valioso, sobre todo en Ferro. En la temporada del campeonato en 1986 promedió 11 puntos y 4 rebotes. Luego pasó por San Andrés, Boca, Independiente (N) hasta que regresó a Caballito para cerrar su carrera en la LNB. Se retiró a los 36, acuciado por las lesiones.
95-Jonathan Treise: Base talentoso y de muy buena capacidad física y goleo. En Quimsa, entre 2007 y 2011, logró las mejores cosas. Llevó al equipo a un subcampeonato de LNB (2008) y a dos títulos, la Liga Sudamericana y la Copa Argentina (ambos en 2009). Luego tuvo idas y vueltas y hoy, a los 33 años, es el titular de un candidato. Está jugando la 14ta temporada. Tiene 10.2 puntos y 3 asistencias de media en su carrera. Ostenta hoy en el 10° puesto histórico en pases gol.
94-Juan Pablo Cantero: Está en 11ra temporada. Irrumpió como un talento en Sionista (12.3 puntos con 40% triples hasta llegar fugazmente a la Selección) y fue elegido el Mejor Base y Mayor Progreso en la 08/09 y Mejor Sexto Hombre en la 09/10. Luego, entre 2010 y 2014, tuvo muchos problemas con las lesiones y eso lo tira para atrás en la lista. En las últimas temporadas, cuando estuvo sano, demostró ser un muy buen anotador y un base que fue progresando en el juego y la toma de decisiones.
93-Fernando Martina: Aspero pivote de gran intensidad, buena defensa y que fue puliendo sus condiciones ofensivas hasta convertirse en un interno muy valioso en las últimas LNB. Lleva 13 temporadas hasta hoy, que sigue activo. El cordobés fue valioso en el primer título de San Lorenzo y en los subcampeonatos de Regatas (2014) y Lanús (2013).
92-Juan Pablo Figueroa: Base de la cantera de Atenas que demostró ser un gran defensor (controló a David Jackson en la final ganada ante Peñarol) y un muy buen conductor, con un respetable tiro de tres. Integrante del Griego dos veces campeón (2003 y 2009), fue elegido el Mejor Sexto Hombre en la 08/09. También ganó Top 4 (2003), una Sudamericana (2004) y una Copa Argentina (2008). Lleva 11 temporadas en la elite, muy buenas las primeras y hoy buscando recuperar el interesante nivel que tuvo.
91-Federico Aguerre: Alero enorme (2m04), de gran capacidad atlética que surgió como una gema en Boca y se fue a España en 1999 (21 años). Le sirvió para progresar y madurar. Cuando regresó ya era mejor y siguió creciendo hasta llegar a ser el mejor alero en la 2014/2015. Hoy es muy valioso por lo que aporta en cada rubro: tiene tiro, defiende bien y es temible de contra o cerca del aro. Todo lo hace en silencio, le dicen el Mudo. Brilló en el Súper 4 que ganó Comodoro y también fue finalista de la LNB. Era un pibe cuando fue campeón LNB (07) y de la Copa Argentina (06) con Boca.
TOP 100: Puesto del 90º al 81º
90-Jose Luis Gil: De la cantera de Estudiantes de Bahía, donde jugó ocho de sus 12 temporadas. Josi se consolidó como un muy buen escolta de la LNB entre 1992 y 1996. Más anotador que su hermano Pablo (más jugador integral), llegó a promediar 26 puntos en la 94/95. En la anterior y la posterior tuvo 20. Hoy figura 48° en la tabla histórica de puntos.
89-Fernando Malara: El Negro es un histórico que permaneció 21 temporadas (figura 14° en partidos jugados tras estar entre 1997 y 2017) haciendo su trabajo de obrero. Alero intenso, de muy buena defensa y capacidad física, que le costó mejorar su ofensiva (apenas 6.4 puntos en su carrera). Valioso en la LNB que ganó Boca en la 03/04 y en los Sudamericanos del 2005 y 2006.
88-Claudio Farabello: Muy buen jugador de equipo, que complementaba a figuras. El hermano mayor de Daniel fue un alero de muy buen físico, gran defensa y tiro respetable. Jugó 15 temporadas (entre 1988 y 2006) y fue valioso en equipos campeones, como el Boca del 97 y Estudiantes de Olavarría del 2000. En tablas históricas está 42° en triples anotados.
87-Carlos Raffaelli: Un crack de los 80 (en Obras), el mejor escolta argentino que la Liga no pudo disfrutar en su esplendor. Le costaba irse de Capital y por eso recién debutó en la LNB en 1987. Apenas jugó tres temporadas (lo limitaron las lesiones), pero le alcanzaron para mostrar su clase, devastador tiro y variantes para anotar gracias a su oficio y corpulencia para el puesto (1.94). Promedió 16.8 puntos en sus 91 partidos.
86-Lucio Redivo: Otro que en poco tiempo (5 temporadas) hizo mucho. Talento bahiense que, con enorme profesionalismo y sacrificio, venció el prejuicio “es muy bajo para jugar la LNB de escolta”. Con apenas 1m84 se apoyó en su velocidad, caradurez, potencia y tremendo tiro para impactar a todos en las últimas dos campañas antes de emigrar a España. Promedió 14.5 pts en la 15/16 y 17 en la 16/17, llevando a Bahía Basket a competir contra los mejores, incluyendo dos subcampeonatos continentales.
85-Nicolás Laprovittola: Apenas cinco temporadas en la LNB le alcanzaron para meterse en el Top 100, sobre todo porque en las últimas dos (de 2011 a 2013) fue uno de los tres mejores bases de la competencia. Llevó a Lanús a un quinto puesto en la 2011/12 y a un subcampeonato en la siguiente LNB y en la Liga de las Américas. Buen conductor para su edad, con varias armas para anotar, sobre todo su tiro lejano.
84-Anibal Sánchez: Falleció a los 26 años en un accidente automovilístico luego de su mejor temporada. Escolta anotador que había salido de Echagüe y luego se había convertido en figura en Olimpo. Ante de su muerte, en 1990, venía de promediar 24 puntos (1989), con 61% dobles y 41% triples. En las cuatro LNB que disputó dejó una muy buena imagen y la sensación de que hubiese sido una figura durante muchas más...
83-Jorge González: El Gigante tiene apenas las tres temporadas que lo califican para integrar este Top 100. Parece poco, es verdad, pero en ese tiempo impactó en el básquet argentino con sus descomunales 2m29. En la LNB del 88 promedió 22.3 puntos y 10.8 rebotes. Una locura. En las tres campañas que disputó terminó con una media de 19.6 pts. Jugar le costaba mucho por las lesiones y problemas de salud derivados de su gigantismo. Saltó a la fama al ser elegido en el draft NBA de 1988 y a partir de 1989 prefirió probar suerte en la lucha libre estadounidense.
82-Roberto López: Pivote algo bajo pero muy fuerte y con oficio que aprovechó una época no tan buena de la LNB para ser elegido el MVP de la competencia. Lo logró en la 2003/2004 con magros promedios de 13 puntos y 8 rebotes. Incluso, la temporada anterior, al rosarino le fue mejor, con 18 y 9.7. Gonzalo García se lo llevó siempre a sus equipos y le rindió mucho. Fue pieza clave del Gimnasia LP que llegó a ser subcampeón en el 2004 y del Libertad que logró un Súper 8 y otro 2° puesto en LNB. Figura 22° en el listado histórico de rebotes totales. Jugó 10 temporadas.
81-Patricio Simoni: El Pato, ala pivote, fue un áspero obrero, que defendía, reboteaba y a veces anotaba cerca del aro gracias a su fortaleza. En muchas de sus 14 temporadas hizo su trabajo con marcada consistencia (hasta llegó a la Selección a fin de los 90) y se despidió con promedios de 10 puntos y 5.2 rebotes. Lo mejor lo hizo en Andino (4 temporadas, con 13.7 pts y 7.3 reb en la 01/02 por ejemplo). Hoy está 17° en la tabla histórica de rebotes. Casi no jugaba pero estuvo en el Peñarol campeón de 1994.
TOP 100: Puesto del 80º al 71º
80-Mariano Ceruti: Un escolta potente, caradura y de gran personalidad que podía anotar. En sus ocho primeras campañas promedió al menos 11 pts (19.1 en la 01/02). Bebo nació en Libertad de Sunchales y fue su emblema. Allí jugó 10 de sus 12 temporadas. El Bebo logró la Sudamericana en 2002 y la Liga en 2008 (era suplente). También fue subcampeón en el 2001 y con GELP en 2004. Se llevó el Jugador de Mayor Progreso en la 99/00.
79-Diego Cavaco: Un histórico (20 temporadas) que hizo su carrera en base a su fortaleza como alero y a un muy buen tiro. En 13 campañas estuvo por encima del 37% en triples y hoy se ubica quinto en triples anotados en la historia. El marplatense de 1m99 arrancó (99) y terminó su carrera en Quilmes (17). Ganó tres torneos nacionales (Súper 4, Súper 8 y Copa Argentina) con 3 equipos distintos, además de dos Sudamericanas con Libertad (2007 y 2008), club en el que quizá disfrutó de su momento top. Hoy, en tablas históricas, figura sexto en partidos y 23° en puntos.
78-Héctor Haile: Base pura calidad que jugó durante 12 temporadas, que podía anotar (20 puntos con Peñarol en 1989 y un 38% en triples durante su carrera LNB) pero, a la vez, era un hábil conductor y un muy inteligente pasador (promedió entre 3.5 y 5.2 asistencias en sus últimas seis campañas). En los inicios de la LNB brilló en River (3 temporadas).
77-Orlando Tourn: Físico de pivote y virtudes de alero, tremendo pasador, muy buen anotador, que fue pieza importante en los títulos de Ferro (85, 86 y 89). Entre el 90 y 96, con sus progresos ofensivos, promedió entre 11 y 20 puntos (Racing en la 95/96). Jugó 15 temporadas hasta emigrar a Italia.
76-Daniel Aréjula: Le decían el Mago, escolta/alero con muchos recursos para anotar fácil (tremendo de contraataque), que en sus siete temporadas (85-92) promedió 15.5 ptos, con 55.5% dobles y 35.5% triples. Pieza valiosa en el Ferro campeón del 89 (11.6 pts con 51% en dobles). Las lesiones lo limitaron luego de su paso por River. Se retiró a los 32. Su caso es otro que sirve como ejemplo de los parámetros de este Top 100. Aréjula fue, por caso, más jugador que Mario Milanesio, pero menos dentro del contexto de la LNB.
75-Jorge Faggiano: Alero muy inteligente, de gran oficio, muy buena defensa y correcta ofensiva que fue equilibrio de muchos equipos. Icono de Estudiantes de Bahía, donde jugó 8 de sus 11 en la LNB. Lo mejor se vio en sus primeras cuatro temporadas (14 puntos) aunque, ya veterano, también se destacó en las muy buenas campañas del Albo en la 91/92 y 92/93.
74-Mario Milanesio: Goleador nato, tirador puro, que promedió al menos 10 puntos en 10 de sus 12 temporadas. En su carrera lanzó un bestial 50% en triples. Pieza valiosa, por tiro y carácter, del bicampeonato de Atenas (87/88), promediando 13.5 puntos. Jugó 9 de 12 temporadas en Atenas.
73-Rubén Scolari: Un clásico pivote de antes (2m07), un sacrificado obrero, muy buen defensor y tremendo rebotero. Tiene el récord histórico de rebotes totales (30) y defensivos (24) en un partido. Jugó 15 temporadas (cortadas por sus dos momentos en España) conociendo bien su rol.
72-Luis Oroño: La Liga lo tomó ya de grande (30 años), pero igual dejó su sello tras 11 temporadas (vale mucho su gran vigencia), como cuando fue campeón de la Liga de Transición con San Andrés. Alero guapo, de gran carácter, defensa, tiro a pie firme (47% triples en LNB) y juego físico que fue muy valioso en los equipos en integró, en especial en Sport, Independiente (N) y River.
71-Jorge Zulberti: Escolta alto con una mano prodigiosa que le permitió tener un bestial 49% en triples en su carrera LNB (13 temporadas). Como anotador/tirador fue pieza clave del título de ese muy buen campeón que fue Independiente de Pico en 1995, al lado de Sucatzky y De la Fuente. Promedió 17 puntos y 55% triples en esa campaña.
TOP 100: Puesto del 70º al 61º
70-Gustavo Oroná: Un histórico que entendió su rol, lo ejecutó bien y se dio el gusto de estar 20 temporadas en la LNB. Jugador de equipo, rendidor, conocedor del juego, buen anotador complementario y muy confiable tirador. Promedio al menos 10 puntos en 11 campañas y estuvo por encima del 37% en triples en esa misma cantidad. Incluso, en una, llegó al 48% y no es casualidad que haya sido la de título de Boca en la 06/07. También fue subcampeón con GELP. Se fue de la LNB a los 35 años y hoy figura 15° en partidos jugados, 22° en puntos anotados y 11° en triples convertidos.
69-Leopoldo Ruiz Moreno: Base/escolta muy talentoso, peligroso, más dispuesto al desequilibrio y a la anotación que al armado de juego, aunque era un pasador con fantasía. Hoy figura 35° en la tabla histórica de puntos y terminó sus 13 temporadas con un interesante promedio de 13 puntos. Su tiro a distancia fue irregular (32% triples). Fue el Mejor Sexto Hombre en la 95/96, en Atenas.
68-Esteban Camisassa: Su mejor nivel coincidió con el inicio de la LNB. Jugó poco (5 temporadas), aunque brilló como un alero técnico, muy talentoso y anotador (19 puntos de promedio) en Unión SF, River (baluarte del subcampeonato de la LNB en 1988), Peñarol y Ferro. Hablamos de un alero de Selección que podría estar más arriba si habría jugado más o si las lesiones no lo hubiesen limitado.
67-Matías Lescano: Sigue activo (y siendo importante) a los 37 años y tras 12 temporadas en la LNB. Del 2003 al 2010 jugó en el Zaragoza español, pero antes, sobre todo en Pico FC, y después alcanzó muy buenos niveles de juego y aporte en sus equipos. Con Atenas se destacó, ganando la Liga del 2003 y el Súper 8 en 2010. Jugador completo, muy buen defensor, versátil, veloz, con muy buen tiro y visión de juego.
66-Eduardo Dominé: Zurdo, picante, uno de los mejores tiradores de la historia. Está segundo en cantidad de triples anotados en la historia (1945 en 718 partidos, una media de 2.7 por juego) y fue cinco veces el que más lanzamientos de 3 anotó en una temporada. También figura 14° en puntos. Símbolo de Quilmes, se retiró a los 39 años tras 16 temporadas (en sólo 3 clubes: 7 años en el Cervecero, 7 en Obras y dos en Ciclista) y con una media de 14 tantos por juego.
65-Eduardo Cadillac: Un crack de la historia del básquet argentino que tuvo su esplendor antes de la LNB, en los años 70 y comienzos de los 80, en Obras. Igual, en siete temporadas ligueras, el Tola demostró su clase, picardía y inteligencia, en San Andrés (3) y River (4). Fue el conductor del campeón de la Liga de Transición (1984) y subcampeón con River en 1988.
64-Selem Safar: Está en su 11ra temporada. Saltó a la consideración general cuando Oveja Hernández lo llevó como tirador al Peñarol que ganó todo. Fue parte valiosa de los últimos dos títulos del Tri, mostrando un lanzamiento rápido y devastador con su zurda. Incluso se destacó en la Selección. Quizá, con un rol mayor, en Boca y Obras no terminó de dar el salto de calidad esperado, pero en las últimas dos campañas regresó al rol de tirador y anotador en San Lorenzo y volvió a ganar todo, como en Peñarol. Busca su sexta LNB con CASLA.
63-Luis Chuzo González: Un anotador empedernido que fue el goleador de la LNB en 1988 con 29 puntos. En Echagüe tuvo dos temporadas de alto nivel y de allí saltó a Atenas (para reemplazar a Campana), donde le costó encontrarse ante tantas figuras. Igual hizo un interesante aporte (16.6 puntos) para salir campeón con el Griego en la Liga corta del 90. Jugó 10 temporadas y cerró con promedios de 17.2 pts, 67% dobles y 37% triples.
62-Maximiliano Stanic: El petiso salido de Morón, de gran personalidad, determinación y recursos para manejar, asistir y conducir, surgió en Pico FC (1997) y llegó a Boca en 2001. Luego se fue a Europa, donde permaneció sus mejores nueve años. Sin embargo, a la Liga volvió bien, con experiencia y hace tres temporadas maneja un equipo de punta como Olímpico. Mejor base, elegido por la prensa, en la 15/16. Tiene un promedio histórico de 4.1 asistencias. Mucho valor que siga destacándose, como titular, a los 39.
61-Javier Maretto: Pieza valiosa del Ferro multicampeón (85, 86 y 89). Alero con muy buena capacidad defensiva e interesante aporte ofensivo por su fortaleza, inteligencia y muy buena mano (tiró entre 43 y 49% en triples durante tres temporadas en Caballito). Ese rol de equilibrio lo llevó a Estudiantes (BB) para llegar a otra final en el 91. Jugó 10 temporadas.
TOP 100: Puesto del 60º al 51º
60-Pepe Sánchez: Quizás el mejor base de la historia del básquet argentino debutó en la LNB con 17 años (en Deportivo Roca) y luego jugó una temporada en Estudiantes (BB) antes de emprender su brillante periplo por la NCAA, la NBA y Europa. En Bahía, con 18 años, se mostró como un armador muy atrevido y talentoso, aunque poco sólido por su inexperiencia. Volvió a la LNB a los 32 años, primero a Obras y luego, definitivamente, para guiar, dentro y fuera de la cancha, a Weber Bahía Basket y su revolucionario proyecto. Jugó tres temporadas, mostrando su única inteligencia, clase, visión de juego y liderazgo. Fue elegido el mejor base en la 10/11. Deleitó y revivió a Bahía, un intangible enorme. Peleó con las lesiones (dolores en la espalda) hasta que lo hicieron retirar a los 36.
59-Gabriel Darrás: Muy flaquito, parecía débil, pero era un crack por su inteligencia, visión de cancha, poder anotador y carácter. Complemento vital de Cortijo en el Ferro dominante de los 80. Ganó 2 LNB (85 y 86) y luego llevó su talento a Independiente de Neuquén. En Sport Club y Olimpia (VT) vivió sus mejores campañas como anotador (14.2 de media entre el 90 y 94). Jugó 12 temporadas y se retiró a los 32 años.
58-Carlos Romano: Llegó a la LNB en su punto más alto, siendo quizá el mejor escolta del país. Se ratificó como un jugador picante, guapo y con gran capacidad anotadora. Promedió 20 puntos en sus 7 temporadas ligueras y en dos estuvo arriba de 24, en San Andrés y GEPU. Personalidad polémica, quizá por eso cambió mucho de clubes (6 en 7 campañas). Una contra: no jugó en candidatos ni peleó títulos. Se retiró a los 36 años.
57-Matías Sandes: Irrumpió como el alero del futuro, pero salvo en las primeras temporadas, no se pudo sostener en el puesto (falta de tiro y movilidad lateral). Sin embargo, tuvo la capacidad para trabajar con el objetivo de destacarse como un ala pivote con dotes de alero. Muy inteligente, gran pasador, fuerte y con muchos recursos en el poste bajo. Pieza valiosa de un Boca que logró ocho títulos, seis nacionales (la LNB 2003, 4 Copas Argentina y un Top 4) y dos internacionales. Hoy es parte de un San Lorenzo que también hace historia: ganó la LNB de 2017. Fue una vez quinteto ideal y dos, el Mejor Sexto Hombre (del 2003 al 2005).
56-Andrés Nocioni: León Najnudel lo reclutó y lo hizo debutar a los 15 en Racing Club. Tras apenas una temporada pasó a Olimpia y lo mejor se vio en Independiente de Pico. Entre sus 18 y 20 años empezó a mostrar su bestial potencia, caradurez y personalidad para ser un suplente clave en un equipo que llegó a una final (cayó 4-3 ante Atenas). Fue elegido el Mejor Sexto Hombre en el 99. En poco tiempo (y muy joven) dejó su huella y eso vale mucho. En el 2011 volvió brevemente a Peñarol para ganar un Súper 8 y jugar un par de juegos LNB junto a su amigo Leo Gutiérrez.
55-Hernán Jasen: Como Manu, irrumpió como un pibe talentoso en Andino y Estudiantes (BB). En BB se destacó en las últimas dos campañas (13.7 puntos y 3.7 rebotes) antes de irse a España y construir una tremenda carrera durante 13 años. Volvió a los 34, pensando en cerrar su trayectoria y aún sigue jugando, a los 40, sorprendiendo por la vigencia. Sus cuidados, experiencia, oficio, liderazgo e inteligencia hacen posible algo que pocos pudieron hacer a esta edad. Valiosa pieza del Bahía Basket de los pibes que impactó con dos subcampeonatos continentales. Dejó su marca por algo más que números y campañas (8).
54-Julio Mázzaro: Goleador devastador, pura elegancia, con tremendo tiro y muy buena capacidad física que deleitó durante gran parte de sus 15 temporadas. Entre 2002 y 2009 promedió entre 18 y 23 puntos y se fue de La Liga con eficacia envidiable para un anotador (51% dobles y 37% triples). Además, en tablas históricas, figura 18° en puntos y 17° en triples anotados. Ganó tres títulos: en la Sudamericana 2009, con Quimsa, fue el MVP de las finales. Mayor Progreso en 2003 y dos veces quinteto ideal. Un asesino silencioso que algunos criticaron por su carácter.
53-Gabriel Díaz: Un histórico que irrumpió como un talento del futuro y tuvo alto nivel. En 13 temporadas promedió al menos 10 puntos y en tres superó los 18. Lo más descollante se vio en Andino, del 94 al 99. Fue campeón en Olavarría (de la Liga y la Sudamericana), siendo un suplente valioso. Hoy, tras sus 20 campañas LNB, se ubica 9° en partidos y 11° en puntos.
52-Raymundo Legaria: Uno de los mejores bases LNB en sus primeras cinco temporadas (2002-2007) hasta que empezaron las lesiones crónicas de rodillas que significaron el principio del fin (apenas lo dejaron permanecer nueve campañas). Fue el cerebro del Ben Hur campeón del 2005 y del Boca que se consagró en 2007, en ambos haciendo grandes duplas con Leo Gutiérrez. Rapidito, inteligente, pícaro y de gran tiro.
51-Pablo Moldú: Escolta todoterreno, capaz de ayudar en el armado y de anotar a partir de su potencia. Gran defensor. Tuvo una década en muy buen nivel (promedió 15.4 puntos, 2.7 reb y 2.3 as entre 1999 y 2007) y fue pieza clave en el campeonato de Comodoro en 2006. Jugó 17 temporadas y se fue de la LNB a los 34 años, siendo hoy 6° en robos y 28° en partidos.
TOP 100: Puesto del 50º al 41º
50-Sergio Aispurúa: El Vasco fue un obrero esencial durante sus 15 temporadas (en siete clubes distintos). Un alapivote/centro con oficio para anotar cerca del canasto, buen defensor y rebotero. Uno de los mejores internos durante 10 años (85/95). Un jugador de equipo, con carácter, que sostuvo vigencia hasta los 35. En las tablas históricas figura 17° en partidos.
49-Raúl Merlo: Chuni fue un escolta voraz, con tremendas piernas, mucha caradurez y un peligroso tiro de tres. Jugador que salía del molde, con rachas letales. Durante 14 de sus 15 temporadas (10 equipos) promedió al menos 12 puntos (en siete fueron más de 17) y se retiró a los 39, con promedios históricos de 16 pts y 64% en dobles. Su look extravagante (jugaba con vincha, aros, pelo largo) fue insoslayable. En las tablas históricas figura 17° en puntos y 26° en triples convertidos.
48-Román González: Talentoso pivote, de mucha talla (2m10) y envergadura para el medio local, que además le sumaba movimientos y recursos ofensivos. Explotó en Libertad (20 pts en la 02/03), llegó a la Selección (bronce en Pekín 2008) y se fue a Europa. En su regreso, en especial en Peñarol (logró la Liga de las Américas 2008 y en la LNB promedió 16.5 pts y 7 rebotes) y Quimsa (16 y 7 en la 09/10), fue dominante. Polémicos comportamientos (y declaraciones), sobre todo fuera de la cancha, limitaron su carrera y lo dejaron mal parado.
47-Andrés Pelussi: Un Ala pivote quizá bajo (1m98), pero muy ancho, con enorme fortaleza, contracción defensiva y gran mentalidad, que además tuvo grandes progresos en el juego ofensivo, en especial su tiro de 3. Obrero de lujo que siempre dio mucho más que lo que dijeron sus números. Fue valioso en Atenas, sobre todo entre 1999 y 2003. Y se consagró en Libertad, siendo el equilibrio, el as defensivo de un equipo que arrasó, el campeón 2008 con Lamas, Ginóbili, Profit y Battle.
46-Gabriel Fernández: Nació como obrero (en Ferro y luego en el Boca campeón de Lamas) pero, al compás de su experiencia con la Generación Dorada, ganó confianza y fue un jugador muy importante en el título del 2000 de Olavarría. Sergio Hernández lo eligió para reemplazar a Wolkowyski (se fue a la NBA) y la Vaca respondió en muy buen nivel para el bicampeonato del Bataraz. Luego se fue a Europa y, en su regreso en el 2007, mostró sus mejores números: promedió 15 puntos y 5.2 rebotes en dos años en Boca.
45-Gabriel Mikulas: Pivote inteligente, de muchos fundamentos. Luego de salir de la cantera de Independiente de Pico, jugó en la NCAA estadounidense y volvió a la LNB para mostrar sus aprendizajes. Entre 2004 y 2016 fue uno de los internos más regulares (promediando entre 11 y 16 puntos y entre 5 y 8 rebotes). Incluso fue el MVP de la fase regular 06/07 y del Súper 8 que ganó con Peñarol. Llegó a una final LNB con el Milrayita. Jugó hasta esta campaña (37 años) y hoy figura 7° en rebotes históricos.
44-Manu Ginóbili: Uno de los casos más difíciles de mensurar porque estamos hablando de quizá el mejor deportista de la historia argentina pero, claro, acá se juzga lo que hizo en la Liga y Manu sólo estuvo en tres temporadas, lo mínimo según el criterio para entrar en este Top 100. Claro, vale mucho que el bahiense hizo mucho en poco tiempo y con una edad temprana (18 a 21). En la primera campaña, en Andino (95/96), fue la Revelación con 18 años, en la segunda (ya en Estudiantes de Bahía) se transformó en un jugador peligroso (16.4 pts, con 58% dobles y 41% triples) y en su última en el país (97/98) fue uno de los mejores cinco jugadores del torneo, con actuaciones cautivantes y números de estrella (25 pts, con 59% y 36%) que lo llevaron a la Selección y a Europa. Fue el comienzo de una de las carreras más increíbles de un basquetbolista en el mundo durante las últimas dos décadas. Y salió de la Liga Nacional…
43-Javier Martínez: Llegó de Paraguay y sorprendió a todos por su tremenda inteligencia, carácter ganador, capacidad de manejar ritmo y conducir a equipos de elite. Incluso lo hizo pese a lesiones crónicas de rodilla y el paso del tiempo (se fue de la LNB a los 39 años). Sabía cuando generar para el resto y cuando anotar. Y lo hacía pese a tener uno de los tiros lejanos más raros de la historia. Fue el sabio conductor de la gran temporada de Regatas (12/13), campeón de la Liga y del Súper 8. Hoy figura 3° en la tabla histórica de asistencias y 24° en partidos jugados.
42-Sebastián Ginóbili: Sepo es otra leyenda que jugó 19 temporadas y lo hizo con mucha mentalidad, calidad, inteligencia, pensando siempre en el equipo. Organizaba, pasaba y anotaba, quizá le faltó defensa y más resistencia física. Fue un ícono de Quilmes y, más de veterano, el lúcido conductor de uno de los mejores campeones de la historia, el Libertad de la 07/08. Hoy, en la historia LNB, está 2° en asistencias, 4° en partidos, 9° en puntos, 10° en robos y 12° en triples anotados.
41-Juan Manuel Locatelli: Alero completo, de muy buena defensa, rebote, penetración, puntería, intensidad y carácter. De los mejores de la competencia entre el 2001 y 2010. Referente (y pieza vital) del Peñarol (10 LNB) que fue protagonista y ganó una Liga (2009) y la Liga de las Américas y un Sudamericano (ambos en 2008). También del Atenas campeón en 2010, con Magnano, y que en 2011 fue segundo. Jugó 17 temporadas. Mejor alero (quinteto ideal) en dos temporadas, del 2008 al 2010.
TOP 100: Puestos del 40 al 31
40-Lucas Victoriano: El base era la joya de su camada (que luego sería la Generación Dorada) entre 1994 y 1997 y ese talento lo mostró en la LNB siendo figura clave del Olimpia campeón de todo, pese a tener 18/19 años y salir del banco. Promedió 14 puntos, 4 rebotes y 4 asistencias en ese campañón de los venadenses. Tan bueno era que se lo llevó el Real Madrid a los 20 años. Luego volvió dos veces a la LNB, en la última para jugar en Lanús (rindió y le marcó el camino a Laprovittola) y San Martín.
39-Diego García: Apenas nueve temporadas le alcanzaron al Rayo para quedar en la memoria, a partir de una tremenda velocidad, muy buena penetración, recursos para definir y ayudar en el armado. En todas las campañas promedió doble dígito (con 51% de campo en su carrera) y en algunas, como cuando fue clave en el gran equipo de Ben Hur que fue campeón de la LNB en 2005 (16.4 pts y 40% triples) y de la Sudamericana en 2006, y en el Quimsa campeón de Santander (promedió 15 puntos en la 14/15), cuando regresó de Europa (estuvo del 2007 al 2012). Mayor Progreso en 2005 y, en la 06/07, fue mejor escolta y goleador de la LNB.
38-Ariel Bernardini: De los mejores tiradores de la historia. Un escolta puro talento, suave como la seda, que explotó en Provincial y gozó de momentos top en San Andres, Peñarol y Boca. Las lesiones lo limitaron y un grave accidente fue el comienzo del fin en su mejor momento. Fue arma esencial en los títulos de Peña en el 94 (promedios de 22 puntos y 46% en triples) y de Boca en el 97 (medias de 18.4 y 45%).
37-Leandro Palladino: Tal vez el mejor Sexto Hombre de la historia de la LNB. Tres veces ganó ese premio: 1998, 1999 y 2000. Pieza esencial, saliendo del banco, del poderoso Atenas. Con el Griego fue dos veces campeón de la LNB (98 y 99) y también se coronó con Boca, ya con rol menor (2007), tras estar cinco años en Europa. De los mejores defensores perimetrales de siempre, a partir de su sacrificio, ductilidad y fortaleza física, que además desarrolló un tremendo tiro de 3. En ocho de sus 10 temporadas lanzó al menos el 36% y superando el 40% durante cuatro.
36-Diego Lo Grippo: Ala pivote de mucha potencia, movilidad y recursos ofensivos que fue de menos a más hasta brillar en Atenas (21 pts y 7 rebotes en la 02/03) y ser el MVP de las Finales 2003. Se fue a Europa en 2003 y volvió en 2009. Enorme vigencia de un líder silencioso que salió de Ferro. Hoy, a los 40 años, aporta su vigencia en su 16ta temporada.
35-Gabriel Cocha: Un histórico que jugó 23 temporadas y, casi en el final de su carrera, logró la ansiada LNB, siendo el MVP de las finales (2006). Debutó a los 17 siendo un base de gran futuro y se consolidó como un escolta que hacía un poco de todo. Inteligente, con oficio y tiro. Icono en Comodoro, donde jugó nueve temporadas (la mejor fue la 95/96 con 20.5 pts, 3.6 rebotes y 3.1 asistencias). Se retiró a los 39 y hoy se ubica 3° en partidos, 8° en triples anotados y robos; 10° en puntos y 13° en asistencias.
34-Sebastián Rodríguez: Tato fue un base muy anotador (llegó a promediar 25 puntos en una temporada y cerró su carrera con 42% en triples) que mejoró su capacidad de conducción y terminó siendo clave en la conquista de 10 títulos con Peñarol (dos LNB y dos Liga de las Américas, entre otros). También fue campeón en Boca, el único equipo donde jugó lejos de Peñarol. Símbolo e ídolo en Peña, donde disputó 15 de sus 16 temporadas. Mejor pasador en dos temporadas y quinteto ideal en tres. Debió retirarse a los 33 años por una afección cardíaca. Hoy, en las tablas históricas, figura 11° en asistencias, 24° en triples y 34° en puntos.
33-Germán Filloy: Fueron apenas tres temporadas en alto nivel (luego jugó cinco más pero muy limitado por las lesiones), pero suficientes para impactar por ser un alero adelantado a la época. Con sus 2m02 sorprendía por su inteligencia, fundamentos, capacidad de penetración y a la vez tiro de larga distancia. Fue el Mejor Sexto Hombre en el 92 y el primer MVP de la Liga (1987). Estuvo en cuatro títulos de Atenas.
32-Juan Gutiérrez: Fue Revelación (2003) cuando salió de Obras y luego se transformó en un interno completo, capaz de anotar (y defender) cerca del canasto o saliendo con su muy buen lanzamiento. Tuvo su gran impacto pese a jugar sólo ocho campañas: con Obras dominó y fue el MVP de la fase regular en 2011 (16.4 pts y 10 rebotes) y 2012 (16.7 y 8.6), aunque no pudo coronarlo en playoffs. Ganó la Sudamericana en 2012.
31-Federico Kammerichs: Surgido de la cantera de Ferro, recién tuvo protagonismo en la última temporada (16.5 para ser elegido Jugador de Mayor Progreso) antes de emigrar a Europa. Regresó tras siete años para ser figura de Regatas (Corrientes) y ganar la Liga en 2013. En dos campañas promedió un doble doble (medias de 13.4 pts y 11.2). Jugó apenas siete temporadas, pero en cinco tuvo un impacto muy considerable, por intangibles. Junto a Quinteros, el Yacaré fue clave en el título del Fantasma.
TOP 100: Puesto del 30º al 21º
30-Daniel Farabello: Base alto de mucha elegancia y dinámica, capaz de anotar (11 de promedio en la LNB con 38% en triples) y pasar (2.9 asistencias), además de ser un tremendo defensor (mejor robador de la historia con 1479 recuperos y una impactante media de 2.7). Irrumpió a los 18 como una gema en los Carasucias de Sport, brilló en Andino, se destacó en Boca y Quilmes, aunque tal vez el mayor recuerdo sea lo valioso que fue en las dos Ligas que ganó Estudiantes (O) en el 2000 y 2001. Jugó 12 LNB.
29-Carlos Cerutti: El Palo era el mejor interno de fines de los 80, el pivote (2m06) con el que soñaba tener la Selección por diez años, cuando murió en un accidente automovilístico a los 21 años (1990). Con 19 había sido el mejor jugador de las Finales de 1988. Sumó dos LNB con Atenas. Apenas seis temporadas (tres top: 88 a 90) le alcanzaron para dejar su huella.
28-Hernán Montenegro: Uno de los mayores talentos de la historia del básquet argentino. Pivote de 2m07 con fundamentos y técnica de alero, un prototipo adelantado a la época. Podía armar juego como un base y definir con su enorme cantidad de recursos. “Era puro talento y carisma, yo pagaba una entrada para verlo”, dicen muchos. Tuvo un nivel top en la 90/91 (22.2 pts y 8.7 reb) en el que llegó a la final y promedió al menos 15 pts en ocho temporadas. Está en este puesto por lo que fue como jugador, lo que deleitó aunque en el balance es más lo que pudo ser de lo que fue. Personalidad volátil que generó muchas idas y vueltas en clubes (sólo en cinco de sus 16 temporadas jugó más de 30 partidos) y un reprochable profesionalismo que le jugó en contra. Ganó poco (dos subcampeonatos) para su talento
27-Luis Villar: El Mili fue otro de esos obreros clave en los grandes equipos, como en Atenas (campeón 1992) y, sobre todo, Boca (1997), por dureza, personalidad, defensa y juego cerca del aro (muy buen ganchito y tiro de frente al canasto). Tuvo, incluso, momentos de brillo personal, como en GEPU (25 pts de promedio en 1990). Sostuvo muy buen nivel por 15 años. En la tabla histórica está 20° en rebotes y 27° en puntos.
26-Sebastián Uranga: Un guerrero, un Chapu Nocioni de los 80/90. Personalidad, corazón, inteligencia, dureza y oficio. Combo para ser clave en el Ferro multicampeón (estuvo en títulos del 85 y 89). Fue MVP de las Finales 85. Tenía limitaciones ofensivas, pero igual podía anotar (13 puntos de promedio en 15 años). En el final, ya arriba de los 30, fue líder y obrero del Olimpia que ganó todo. Hoy, en la historia, figura 12° en rebotes
25-Gabriel Deck: Aparece el primero de la nueva camada. Tortu lleva apenas nueve temporadas en la LNB y tiene sólo 23 años, pero ya ha logrado convertirse en el mejor del torneo. Hace dos años que es el jugador más desequilibrante y ya fue campeón, siendo MVP de las Finales (2017). Va camino a repetirlo en esta campaña. Con este dominio, breve pero contundente, le alcanzó para superar a varios históricos.
24-Gustavo Penka Aguirre: El base que ha dominado en las últimas temporadas, el conductor de los últimos tres campeones. Irrumpió en Quilmes como un armador guapo, con oficio, capacidad física y gran inteligencia. Con un estilo poco ortodoxo, pero con mucho potrero y carácter para hacer jugar, anotar o ser líder en momentos difíciles. Caso atípico: tocó fondo cuando nadie lo quiso en la LNB 13/14, por sus pocos cuidados y profesionalismo, pero resurgió y hoy es un base de elite nacional. Ya tiene cinco títulos nacionales y una Liga de las Américas. Fue el MVP en la 14/15 y del Súper 8 del 2014. En tablas históricas, tras 12 campañas disputadas, ya está 14° en asistencias.
23-Bruno Lábaque: Fue mucho más que el hijo del presidente más influyente en la historia de la LNB. Convivió con ese mote, pero como jugador demostró corazón, defensa, personalidad, conducción y capacidad anotadora. Jugó 21 temporadas (920 partidos, 5° en la historia, muestra de gran vigencia), 19 en Atenas, donde logró 12 títulos, 5 de LNB (1997-98, 1998-99, 2001-02, 2002-03, 2008-09). Fue un gran suplente de Milanesio y luego, cuando se retiró Marcelo, resultó el titular (y líder) en dos anillos más. Eso tiene enorme valor. Cuarto en asistencias en la historia.
22-Martín Leiva: Gran talla (2m10) y potencia física para la LNB, mucho carácter y contracción defensiva. Un combo que fue clave para ser muy importantes en las conquistas de 6 LNB: cuatro con Peñarol en seis temporadas (además de una Liga de las Américas) y dos con Boca en otras seis (hay que sumar tres Sudamericanos). Un guapo que, en Peña, hizo una dupla dominante con Gutiérrez. A los 37 está en su 19° temporada y, en tablas históricas, 9° en partidos, 3° en rebotes y 4° en tapas. Limitaciones técnicas (y ofensivas) le jugaron en contra para no crecer más.
21-Esteban Pérez: Alero de Selección, con gran tiro y mucha fortaleza física. Poderoso en el rebote, la defensa y con mucho poder de fuego. Jugaba cerca y lejos del aro, con una tremenda puntería (promedió entre 36 y 42% en triples durante 10 años). Pieza clave en el GEPU campeón 93. Brilló en otros 7 clubes y jugó en la LNB hasta los 38 años. Sexto goleador histórico de la competencia.
TOP 100: Puesto del 20º al 11º
20-Lobito Fernández: Excelso base, muy inteligente, con bajo perfil pero muy elogiado por sus compañeros. Manejaba el ritmo, tenía gran visión de juego y podía anotar. Pieza vital de cinco campeones, en tres clubes distintos: GEPU (91 y 93), Boca (97) y Estudiantes de Olavarría (2000 y 2001). Gran vigencia. Jugó 16 campañas y se retiró a los 37, siendo hoy el sexto mayor asistidor de la historia y el 12° en partidos disputados.
19-Marcos Mata: Casi un De la Fuente de esta nueva era. Uno de esos tipos que no lucen pero son amados por DT y compañeros, por tener un combo pocas veces visto (capacidad atlética, tremenda defensa, muy buen tiro a pie firme y mucho aporte en el rebote) y estar siempre pensando en el equipo. Pieza clave del Peña tricampeón y del San Lorenzo bicampeón. Sexto jugador más ganador de la historia. Además, fue tres veces campeón de América (2 con Peña y 1 con CASLA). Decisivo en muchos campeones. Los hizo ganar en silencio. En la historia está por meterse en top 15 de tapas, lo que habla de lo completo que es.
18-Rubén Wolkowyski: Portento físico, profesional, disciplinado que fue creciendo en su rol hasta terminar siendo la figura de un campeón. En los inicios, en Quilmes, anotaba mucho (entre 17 y 20 puntos en tres campañas). También tuvo momentos de obrero hasta que explotó en Olavarría (16.5 y 7.1 rebotes). En la 99/00 fue campeón y MVP de las finales. Eso lo elevó a otro nivel. De hecho, desde allí saltó a la NBA. Volvió en 2009 y otra vez ocupó su rol sacrificado, sin que se le cayeran los anillos. Jugó hasta los 42 en la LNB. Hoy es el 2° en tapones y 4° en rebotes.
17-Marcelo Richotti: Estrella y alma del Pacífico de los milagros en los inicios de la LNB. Un tanquecito que siempre iba para adelante y fue de los mejores tres bases durante los primeros 10 años LNB. También fue líder en Independiente (N), Estudiantes (BB) y Peñarol. Justamente con el Milrayita fue campeón, siendo determinante. Se retiró en Comodoro (oficio) a los 37, hoy es el 9° máximo asistidor y el 20° en puntos.
16-Facundo Sucatzky: Base pequeño pero de enorme personalidad, corazón y oficio. Podía anotar mucho y, a la vez, hacer jugar. Visión, pase y un artista del pick and roll. Petiso guapo, ganador. Brilló en el título de Independiente de Pico en el 94. Es el máximo asistidor en la historia (4080, 4.9 de promedio) y logró ser el líder de ese rubro durante diez temporadas seguidas. Además tiene récord de pases gol en partido de fase regular (20, en 2002) y en un partido final (14 en 1995). Es el 16° goleador histórico.
15-Fabricio Oberto: Apenas cinco temporadas, dos en muy buen nivel y la última (97/98), consagratoria (Mejor Jugador), le alcanzaron al cordobés para dejar su huella y escalar por encima de otros históricos que jugaron (a muy buen nivel) más años. Se fue a Europa a los 23 pero antes fue Jugador Revelación en el 95, Mejor Sexto Hombre en el 97 y MVP en el 98, consagrándose en el 4-0 sobre Boca en la final frente a Wolkowyski. Se comió la Liga en una época de alto nivel y con extranjeros de elite.
14-Julio Rodríguez: Elegante y explosivo a la vez, fue uno de los mejores anotadores de la historia. De hecho es el 2° goleador de la LNB con 16.252 puntos y un promedio de 20. Rey de la media distancia: casi no tiraba de tres, pero en silencio te mataba de dos. El Lunguito saltó a la fama en Pacífico en los inicios y luego sostuvo admirable nivel por al menos 15 años. Quizá lo mejor se vio en Regatas SN (llegó a promediar 26 pts). Tomó la decisión de jugar en su ciudad (San Nicolás) y no en candidatos. No peleó títulos y eso le quitó trascendencia. Se retiró a los 39, tras 19 campañas. Dato que habla de su capacidad: figura 9° en rebotes totales.
13-Jorge Racca: Goleador y tirador devastador, que pelea con Espil por el título de “mejor lanzador de la historia”. Escolta alto (1m98), potente, atlético que brilló en el Olimpia campeón de todo (95/96). Jugó sólo 7 Ligas pero su huella es imborrable. Su promedio de 23.2 puntos (con 41% en triples) es el más alto entre nacionales. El pampeano se fue en el 98 y estuvo cinco años en Europa. Un animal del aro con una atractiva capacidad atlética. Se retiró en el TNA, a los 36 años.
12-Alejandro Montecchia: Nació como una gema (en Sport Club con los Carasucias) y logró transformarse en crack dentro de la misma LNB. De la Generación Dorada fue el que más jugó en la LNB (13 años) y el que más dominó. Base muy potente y anotador que brilló en Sport, Olimpia (fue motor del campeón nacional y sudamericano 95) y en el Boca del Che García. En su regresó penó por las lesiones en Regatas Corrientes, pero mostró el liderazgo, el oficio y la calidad que fueron claves en la Selección.
11-Diego Maggi: Pivote (2m06) icónico de los 80, en la LNB y la Selección. Pilar esencial en el Ferro tres veces campeón de la Liga (además sumó tres sudamericanos) y con aportes muy valiosos en los títulos de GEPU (91) y Peñarol (94). Ganó con 3 clubes, dato muy relevante. Pieza clave en el armado de equipos en una época con pocos pivotes nacionales. Muy buen defensor con interesantes recursos ofensivos. Mejor pivote argentino durante casi una década. Las lesiones lo limitaron. Igual, jugó hasta los 35.
Top 100: Puestos del 10º al 1º
10-Walter Herrmann: Sus mejores años los pasó en la NBA y Europa, pero cuando estuvo en la LNB, dejó su huella indeleble. Fueron pocas temporadas, pero las dominó como pocos, incluyendo dos premios de MVP en finales. Resultó la estrella (20 pts y 6 rebotes), MVP y campeón del Atenas (2002) que había perdido a Milanesio hacía meses. Nada menos. En su regreso brilló otra vez en el Griego (22 y 7) y también San Lorenzo (17.3 y 5.6, con 43% en triples), con el que ganó otra Liga y fue el mejor de las finales 2016. En total acumula cuatro MVP, contando los dos de fase regular, que alcanzó con 13 años de diferencias (2001 y 2014), lo que marca que dominó de joven y ya no tanto. Tremenda vigencia gracias a su físico privilegiado y gran mentalidad. No anunció su retiro, jugó hasta los 38.
9-Diego Osella: Interno talentoso y rendidor, con muy buenos dotes ofensivos y valorable trabajo defensivo. Fue pieza vital del Atenas que ganó en tres décadas distintas: suma seis LNB (1988, 1990, 1992, 1998, 1999 y 2009) y seis títulos internacionales. Fue el MVP de la final 99 y Olimpia de Plata en 1995. Enorme vigencia, dejó la actividad a los 41 años, tras 22 temporadas (19 en Atenas, que retiró su N° 11), siendo el jugador con más partidos en la historia (1.096) y el cuarto goleador de siempre (12.360). Promedios históricos de 11.3 pts y 6.2 rebotes ratifican su regularidad.
8-Miguel Cortijo: Eximio conductor, manejador de tiempos y pasador de elite. Fue el cerebro del Ferro que dominó la LNB durante varios de los primeros años (campeón 85, 86 y 89). Promedió 5.6 asistencias en las primeras cuatro. Deleitó por su lucidez e hizo mejores a todos, a varios que eran obreros y los hizo ver mejores… En aquella época lo suyo fue dominante, más que desde la cabeza. Sumó 10 temporadas y jugó hasta los 39 años, con destellos de un talento único para conducir con sabiduría.
7-Facundo Campazzo: Caradura, de enorme calidad, capacidad física y personalidad. Un torbellino que revolucionó la Liga como pocas veces sucedió antes. Con 20 años se hizo cargo de la base de Peñarol tras el retiro repentino del ídolo Tato Rodríguez y fue creciendo hasta dominar la LNB durante dos años. Incluso desplazó a Leo Gutiérrez del lugar de estrella del equipo. Fueron sólo 6 temporadas en la Liga, pero suficientes para marcarla a fuego. Clave en el histórico tricampeonato de Peña. Fue el MVP de las Finales 2012 (última del Tri) y 2014. Lo que hizo a su edad (entre los 21 y los 23) fue inédito y quedó en la historia.
6-Paolo Quinteros: Anotador devastador que se convirtió en un jugador integral, con un alto nivel incluso hoy, a los 38. Llegó del TNA con el mote “es demasiado bajo para triunfar en la Liga” y no sólo fue valioso para los dos títulos en Olavarría. En Boca se consagró como uno de los mejores de la LNB (20.4 pts con 39.7% en triples), ganando cinco títulos (una LNB, tres Copa Argentina y un Top 4). Ese nivel de elite lo ratificó en Regatas Corrientes con una importancia que va más allá del 16.8 puntos de media. Es líder y generador de juego. Tanto que en la última temporada promedio su máxima de asistencias: 4.1). Fue el MVP en la 12/13, cuando fue campeón con el Fantasma. Estuvo cinco años (y dejó su sello) en España (2006/2011), pero en sus 11 temporadas de LNB fue casi siempre determinante (es el 11° goleador histórico) y suma diez títulos nacionales.
5-Juan Espil: Elegante y temible anotador (quizá el mejor de la historia), que se fue a Europa (1996) siendo tirador y volvió (2008) a los 40 años, reciclado y con un juego integral. Sorprendió por su físico y enorme vigencia al jugar hasta los 44 en muy buen nivel en Bahía. Es el cuarto anotador histórico de la LNB, pese a haber jugado sólo 13 temporadas. Fue tres veces goleador de una temporada, incluso promedió una bestial marca de 31 puntos en la 95/96 con Atenas. Tiene la mejor media de triples por juego (3.0), además de una gran eficacia (41% en 589 partidos) y un altísimo promedio de puntos (21.2). En ocho temporadas estuvo arriba de 20 y en 6 arriba de 24. Pero, lo más importante, fue cómo descolló cuando fue campeón con GEPU en 1993: promedió 25 pts, 60% dobles y 40% triples.
4-Esteban de la Fuente: El Leo Gutiérrez de los 90. Quizá no tuvo la excelsa calidad de sus competidores en el top 5, pero deslumbró por su gran mentalidad, liderazgo y carácter ganador. Campeón con Peñarol (94) e Independiente de Pico (95), siendo la estrella. Fue el MVP de ambas finales (seguidas). Un todoterreno que hacía todo, siendo determinante en defensa y ataque, algo que pocos lograron. Por eso ha sido el único que logró dos triple dobles en la historia. Jugó hasta los 40 años (18 Ligas), destacándose en 3 décadas distintas (entre 89 y 98 promedió al menos 10 puntos).
3-Héctor Campana: Crack de los que surgen pocas veces en la historia. Es el anotador histórico de la LNB (17.359) y ostenta varios de los récords de anotación, como 62 en un partido y 44 de media en una temporada, con River. Brilló por 15 años, primero como feroz anotador (cuatro años seguidos fue el goleador LNB) y luego como jugador integral. Identificado con Atenas aunque tuvo idas y vueltas (3 ciclos, 9 campañas, 5 LNB). Siempre la rompió, sobre todo haciendo dupla con Marcelo, con quien conformó el –quizá- mejor equipo de siempre, el Atenas del 97. También dejó su huella en Olimpia, River, GEPU, Banco Córdoba, Boca y Peñarol. Tiene 7 LNB. Cuatro veces fue el MVP de la temporada y tres en finales. Se reinventó luego de lesiones difíciles. Podría ser el 1° o el 2°, tranquilamente.
2-Marcelo Milanesio: El símbolo (debería ser el logo) de la historia de la Liga Nacional. Y, obvio, de Atenas, donde jugó sus 18 temporadas entre 1985 y 2002. En muchas dominó por su temible jerarquía. Cerebral como pocos y, a la vez, peligroso anotador. Combinación única. Carisma, carácter ganador, fundamentos y elegancia. Ganó siete LNB en 3 décadas distintas (1987, 1988, 1990, 1991-92, 1997-98, 1998-99, 2001-02) y fue tres veces el MVP (dos en fase regular -92 y 94- y una en finales -90-). Hizo siempre mejores a sus compañeros y fue líder. Y un dato fundamental que fue tomado en cuenta: mucha gente pagaba una entrada para ir a verlo y para muchos es el máximo ídolo de la historia del deporte cordobés.
1-Leo Gutiérrez: Nacido para ganar. Y liderar. Un animal competitivo con gen Generación Dorada y una personalidad avasallante. Donde fue, ganó. Durante una década los DT y dirigentes repetían “el único que te hace ganar es Leo”. Así fue que hizo lo que nadie: 10 títulos en 23 Ligas disputadas, con cinco equipos distintos (Olimpia, Boca, Ben Hur, Peñarol y Atenas) y en cuatro de ellos siendo la superestrella. También le agregó seis títulos internacionales de clubes. Hay que sumarle intangibles, como la increíble LNB que gana con Boca y que, con Atenas, lo hizo en distintos momentos, la última en 2009. Nueve veces nombrado el MVP, cuatro en fase regular, cuatro en finales y un Súper 8. Jugador con más presencias y triples, además de ser el que más tiros de 3 anotó en seis temporadas y tener el récord en un juego (15). Justamente el tiro es el resumen de cómo trabajó para mejorar. El que más evolucionó de las superestrellas.