Instituto Atlético Central Córdoba

Córdoba (Córdoba)

LNB · 14 de Noviembre de 2021

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Análisis: el crecimiento de Loku hasta ser uno de los mejores anotadores

Loku ya es uno de los perimetrales ofensivos más completos y nuestro columnista analiza en qué aspectos del juego creció. Para entender su momento y las chances de Selección.

Vaya paradoja: una de los aspectos más importantes para ser un gran anotador es aprender a jugar sin la pelota, más aun cuando no se tienen cualidades de guardia. En la Liga Nacional hay sobrados ejemplos y particularmente uno que no deja de crecer: Martín Cuello. Lo mejor de su juego pasa por cómo interpreta y usa los espacios en las diferentes variables. Sí, es cierto: que su equipo sea Instituto lo beneficia de sobremanera. La Gloria es uno de los mejores elencos corriendo la pista, y allí, Loku está en su salsa. Transición defensa-ataque al sitio correcto, recepción y tiro.

Pero ojo que su repertorio es mucho más amplio. Si bien no tiene una gran explosión (cuenta pendiente clave), es muy bueno en tránsito saliendo hacia ambos perfiles. Su ejecución usando bloqueos indirectos o flares suele ser letal con su combo de velocidad de tiro y eficacia.

En su progreso y madurez ha incorporado una acción que le permite polivalencia posicional: anotar o generar como portador. Si bien está lejos de ser su especialidad, mejoró su 1vs.1 tirando desde el bote, y aun más utilizando pantallas directas con un lanzamiento que lo distingue: una estupenda flotadora desde rango medio. Todos esos recuersos exponen a Cuello como a uno de los mejores anotadores de la Liga, incluso en un equipo en el que muchos necesitan meter puntos para ser felices. Se ganó la confianza de sus compañeros (IACC tiene muy buenos pasadores y bloqueadores) y adoptó rápidamente el "ADN Victoriano", disfrutando semejante dinámica y juego colectivo.

¿Cuáles son sus detalles a mejorar para pisar ligas superiores? En Argentina, puede jugar hasta de ala pivote por los beneficios y espacios que produce su amenza de tiro y porque no todos los equipos tienen jugadores que lo dominen al atacarlo. Pero sufre cuando tiene que marcar a jugadores explosivos. Además, debería aprender el oficio de generar desde poste bajo/medio. Su velocidad de ejecución es buena pero no le alcanza. Su mecánica de tiro es correcta pero no perfecta. Y sus piernas necesitan una marcha más. Ser intenso no es sinónimo de explosividad. Si su ambición el llegar a Europa, ese ítem es impostergable.

Por lo pronto hoy, sin estar entre los mejores de estadísticas en ningún rubro (promedia 14.4 puntos, 69% de campo, 43% triples, 3.7 rebotes y 2.9 asistencias en sus primeros 12 partidos), se destaca claramente en nuestra Liga Nacional dentro de un candidato que ha sido campeón, ya fue llamado a la Selección en las últimas ventanas FIBA y ahora sueña, con motivos sólidos, con volver a estar bajo la dirección de Néstor García.

Fotos de gráfica: Leandro Gómez