Desde la creación de La Liga Nacional, la de Córdoba ha sido de las regiones con más y mejor básquet. Atenas, el más ganador con 9 títulos, participó del primer partido del torneo, misma noche en que Instituto -el otro cordobés campeón- también hizo su debut. El DT olímpico es Rubén Magnano, y numerosas estrellas surgieron de esta provincia: Milanesio, Campana, Filloy, Maggi, Osella, Oberto, Prigioni, Campazzo y cuántos más. Y hoy, en La Liga Argentina, encontramos tres instituciones cordobesas que se han repartido la punta de su Conferencia durante toda la temporada. San Isidro, Ameghino y Barrio Parque, con sólo 4 derrotas hasta el momento, lideran la Norte y sueñan con el ascenso.

Un estilo definido, encolumnado en planteles que se conocen y ensamblan fantásticamente, apoyado por dirigencias con métodos y objetivos evidentes, sosteniendo cuerpos técnicos, impulsando formativas y buscando resultados pero también crecimiento constante. El veloz San Isidro con Zezular, Montero y Assum como exponentes, el compacto Ameghino de Franca, Martínez, Lezcano y Abeiro, el potente Barrio Parque comandado por Buchaillot, Pedano y Ledesma. Pero, ¿cuál es la fórmula para alcanzar tan exitoso presente? En busca de respuestas, hablamos con sus entrenadores.

Comenzamos con Daniel Beltramo, DT del San Isidro puntero con 23 victorias en 27 juegos: “Lo mejor que tenemos es una identidad, tanto de local como de visita, sabemos a qué jugamos y cuándo nos es favorable o no un partido. Además, tenemos muchas vías de gol y eso nos hace complicados de defender. Este año, los cordobeses hemos dominado la Conferencia, pero todavía falta mucho. Los equipos ya están armados para playoffs y lucharán por terminar en la mejor ubicación”.

Por su parte Pablo Castro, entrenador del escolta Ameghino que registra 22 triunfos en 26 encuentros, coincide: “Es clave la continuidad de una identidad de juego, apropiada y bien ejecutada por el plantel. Hoy estamos en reconstrucción, insertando refuerzos y buscando llegar a playoffs al mejor nivel. Esta Conferencia es muy pareja, el año anterior Oliva marcó el camino y este somos tres los que pelemos arriba, pero cualquiera puede ganar. Será importante sostener localías y aprovechar los buenos momentos”.

Por último Gustavo Peirone, coach del Barrio Parque que ostenta también 21 partidos ganados de 25 disputados, señala: “Es fundamental conocernos, haber mantenido la base y sumado refuerzos de nuestras características que pudieran adaptarse rápido. Otra clave es no haber sufrido demasiadas lesiones y poder trabajar mucho tiempo con plantel completo. La Norte siempre es dura, de paridad y juego físico. El cierre será lindo porque somos unos 7 equipos con posibilidades de meternos entre los 4 primeros, y pelearemos por ese privilegio”.

Consultando sobre un denominador común, Beltramo opina: “Los tres clubes tienen estructuras sólidas, con dirigentes confiables que proyectan con tiempo y rumbos claros, repitiendo equipos y apostando a jóvenes. Me genera mucha satisfacción tener equipos competitivos y bien organizados, es un gran momento de nuestro básquet, con tres en la primera categoría y tres que peleamos por ascender, y ojalá esta vez nos toque a nosotros”.

Bajo el mismo interrogante, Castro dice: “Los provinciales de clubes de Córdoba son muy competitivos, al subir a La Liga Federal lo hacen con un piso alto y eso se traslada. En 2022, fue un hecho inédito haber tenido campeones en las dos mayores divisiones, y este año se sostuvo con estos tres clubes con continuidades de cuerpos técnicos y estilo de juego. Fue un desafío venir de Buenos Aires a una región de tanto nivel, desde la época gloriosa de Atenas”.

Y finalizamos con Peirone, que piensa: “En los tres clubes se juega dinámico, a muchas posesiones, y se apuesta a una combinación de experimentados con jóvenes talentosos. Me pone contento que los equipos de mi tierra sean protagonistas, porque además del éxito deportivo significa también más trabajo y desarrollo para el básquet cordobés”.

No cabe duda que el conseguir una identidad y una metodología clara de trabajo, que se pueda y también se quiera sostener en el largo plazo, es crucial en el presente basquetbolístico de la provincia. Los procesos, la seguridad, la confianza, la proyección, la inversión, y en definitiva el tiempo, un tiempo bien aprovechado, es una característica compartida por San Isidro, Ameghino y Barrio Parque. Son un notorio modelo a seguir de La Liga Argentina, y tres grandes candidatos a llevarse el ascenso al final de esta temporada 2022/23.

Informe: Por Kevin Chareun para Prensa ADC