Liga Argentina · 25 de Mayo de 2016
“No queremos cortar este sueño”
José Luis García nació en Hispano Americano, es protagonista de todos los ascensos que han llevado al club a vivir este momento; primero como entrenador consiguiendo la Liga Patagónica en el 2008, luego como asistente de Bernardo Murphy con la conquista del Torneo Federal en el 2014 y ahora tras alcanzar esta histórica final del TNA.
Su corazón late celeste desde niño, el Hispano es parte de su vida, y en la historia de su amado club él, José Luis García, ha escrito varias páginas de gloria deportiva en el básquet. Primero sentado en el banco como entrenador en aquella Liga Patagónica del 2008. “Fui a Buenos Aires con la idea de estudiar Educación Física, la experiencia y las cosas que fui viviendo me fueron llevando a dedicarme específicamente al básquet, situaciones personales como el fallecimiento de mi viejo me hacen decidir venir a Río Gallegos y seguir con la parte de básquet más cerca de la familia, del club y me ofrecen en ese momento dirigir la primera del Hispano en la Liga Patagónica”.
Todo caía vertiginosamente pero tenía claro su horizonte y lo que se podía hacer porque el Hispano tenía la materia prima para pelear por sus sueños: “Tengo una charla con Gastón Morales y con Mariano Bertinat en mi casa, hablábamos de la posibilidad de estar en el equipo, muy motivado con esto, con la vuelta de Gastón a la ciudad, que siempre estuve en contacto con él cuando estábamos los dos viviendo en Buenos Aires, sabía que Gastón había dejado una temporada completa el básquet, incorporamos a Juan Meza, teníamos jugadores que nos podían dar una mano como Roberto Nelly y Jairo Goichoechea y ascendemos a la Liga B, en ese momento todavía no se llamaba Torneo Federal, después algunas situaciones de diferencias con algunas decisiones que se tomaron me hicieron quedarme con las categorías juveniles y dejar que la Liga”.
Sanar heridas…
José Luis siguió con las categorías juveniles del Hispano, había quedado atrás el impulso de querer largar todo porque se había dado cuenta que “el club es mucho más importante y está mucho más allá de las decisiones que podemos tener”; el Hispano tiene un camino sólido en el Torneo Federal, el equipo siempre era candidato esta vez con sus amigos en el banco como entrenador y asistente. “Después que Leo (Roquel) que fuera asistente mío junto con Ignacio Rodriguez Suarez estuvieron como asistentes, luego Leo tiene la posibilidad de dirigir Liga, lo hace de muy buena forma, el Hispano siempre era visto en este Torneo como uno de los candidatos de la zona sur, pero le faltaba dar ese golpecito; cuando se contrata a Bernardo Murphy me hablaron para ver la posibilidad de estar como primer asistente, este desafío me parecía un momento justo para sanar heridas para volver a estar a lo que uno le gusta, con un técnico de mucha experiencia del cual tenía las mejores referencias como persona además de la de entrenador”.
Para superar lo que se había hecho, había que ascender…
Empezó a caminar junto con Bernardo Murphy en este sueño de conformar el equipo que pudiera dar el salto al Torneo Nacional de Ascenso, miraban, estudiaban jugadores y siempre con el respaldo del club y de la sub comisión de básquet. “La única posibilidad de superar lo que Leo había hecho era ascender. Y tuvimos la mezcla de mérito, trabajo, jugadores, dirigentes y la suerte que tenés que tener para que todo se dé, tuvimos la posibilidad de ascender junto con Bernardo (Murphy), este año del ascenso continuamos conversando y viendo de la parte del plantel, quienes podían continuar, quienes no”, recordó García. “Rearmamos el equipo para este año, hablamos de cómo se iba armar, de cómo se iba a hacer, tuvimos en el medio la situación del conflicto entre la Asociación de Jugadores y la Asociación de Clubes, que hizo que no se pudiera contratar por bastante tiempo, estábamos en Paraná en la clínica anual para entrenadores pensando en los jugadores que íbamos a traer, los dirigentes hicieron un esfuerzo enorme para contratar lo que pretendíamos con Bernardo, arrancó esta temporada con esa expectativa, sabiendo que habíamos armado algo parecido a lo que habíamos planteado en nuestras cabezas. La idea y los jugadores estaban, teníamos todos los ingredientes para hacer una buena torta, ahora nos faltaba hacerla, conformar un buen equipo, trabajar a lo largo del año y eso es lo que se fue haciendo, tuvimos momentos buenos, otros no tanto, con el karma de no poder ganar de visitantes, hemos ido trabajando en el año, en ese momento nos encontramos ante las puertas de una final del TNA, lugar en el cual muchos entrenadores y jugadores, que jugaron muchísimos años y no han tenido la posibilidad de disputar esto”.
Hermoso, imborrable
Se le enlazan varios sentimientos a José Luis García, pero trata de separar las cosas para estar enfocado en su responsabilidad como asistente pero tiene esos segundos de poner el freno y valorar lo conseguido. “Estar sentado en ese banco, como me pasa a mí, un chico que empezó en este club a los seis años y hoy tener la posibilidad de tener que compartir la experiencia con un tipo como Bernardo Murphy y con jugadores que te pueden llevar a un lugar como éste, disfrutándolo. Siempre hay unos segundos previo al juego que miras la tribuna, el contexto y te das cuenta lo que estás por jugar y realmente es una situación linda para disfrutarla, para guardarla en la retina, en la cabeza, el último partido en el Tito Wilson a cancha llena, estábamos para salir del vestuario y escuchaba la tribuna y la verdad que es hermoso, imborrable y ahora lo que queda hacer es seguir trabajando, y no cortar este sueño, jugar estos últimos partidos dejándolo todo”.
El Hispano es una parte enorme de mi vida…
Se le quiebra la vos cuando cuenta lo que significa el Hispano Americano para su vida, se le llenan los ojos de lágrimas por la emoción de poder estar viviendo este presente en su casa celeste y sabe que lo que se está logrando es porque hubo gente visionaria y de esfuerzo para que esta realidad acaricie a todo el mundo hispanista. “La verdad que la historia me ha sorprendido muchísimo, estuve en este club cundo teníamos la cancha de parquet viejo, teníamos una Liga Patagónica, y al ascender muchos se asustaron, que era imposible llevar a cabo un Torneo Federal por los gastos, por la cancha… Cuando a uno les pasa las cosas actúa en consecuencia, como gente como el “Chona” (Ignacio) Rodríguez que fue el primero que se le ocurrió el tema de vender el piso del Tito Wilson, de comprar el metro de parquet y ese tipo de cosas son las que impulsan a la gente para situaciones positivas, estas cosas hay que aprovecharlas y acompañarlas, todo eso fue haciendo que el Hispano hoy en día tenga esta posibilidad, recuerdo a un jugador del Torneo Federal que me dijo “José Luis ustedes merecen como club estar en TNA decían: en un año mejoraron las instalaciones, otro año mejoraron los vestuarios, después la cancha…. Nosotros debemos valorar lo que tenemos pero saber que nuestra posibilidad de crecimiento está y en lo que hagamos como club, esto no tiene límites en lo que podemos soñar para realizar cosas”.
"El Hispano es una parte enorme de mi vida, inseparable de mí, de lo cual no sé con qué llenaría yo si mañana me largas de nuevo y me decís el Hispano no está… No tengo forma de imaginar eso”, cerró con lágrimas en los ojos y se subió de nuevo a este sueño de estar en la final del TNA con su amado club.
Informe y Foto: Prensa Hispano.