-Instituto se sacó la espina de la temporada pasada, al perder sus dos finales frente a Ciclista y San Martín por el ascenso, y en esta campaña puso a la Gloria en la máxima categoría del básquetbol argentino en semifinales. ¿Cuál fue la clave?

-En esta temporada el equipo mostró mucho carácter y creo que esta campaña de Instituto estuvo entre las mejores en la historia del TNA por la cantidad de juegos que ganamos. Pero también creo que todo eso no servía si no nos coronábamos con el ascenso. Por suerte se nos dio y estamos muy contentos, no es poco ascender a la Liga Nacional. Quiero agradecerle a los dirigentes que siempre se portaron muy bien con todos nosotros, esto es mérito de ellos, y a los jugadores porque la verdad fue un gusto trabajar con ellos en toda la temporada. Estoy muy feliz y conforme con lo logrado.

 -Fue un partido muy emocionante hasta el final, donde Instituto pudo cerrarlo mejor.

-Durante el partido creo que defendimos mal pero mantuvimos la calma y ordenamos mejor las ofensivas en el final porque sabíamos que la presión llegando a un final cerrado la tenían ellos. Jugamos tranquilos y gracias a Dios se nos dio.

-¿En lo personal qué significa este ascenso?

-Tuve la suerte de en los últimos cinco años que he dirigido, de lograr cuatro o cinco ascensos en clubes diferentes. Este ascenso me llega en un parte buena de mi carrera, me agarra en un club que quiero mucho, que es de Córdoba, de donde yo soy y tengo muchos afectos. Estoy muy contento de haber logrado esto y fundamentalmente quedar en la historia del club.