Liga Argentina · 27 de Diciembre de 2019
"El equipo hizo un clic en el sacrificio individual hacia lo grupal"
Rodrigo Sánchez, una de las máximas figuras del exitoso presente de Oberá TC, se refirió al momento que atraviesa tanto desde lo colectivo como desde lo individual. Las 9 victorias al hilo, el cambio de chip que hizo el equipo, la llegada de Hiriart y su nuevamente brillante presente en lo personal.
Oberá Tenis Club cerró el 2019 con un nivel altísimo que lo dejó como el equipo de mejor actualidad antes del receso por las fiestas. El elenco misionero encadenó una racha prodigiosa de 9 victorias de forma consecutiva en el tramo final del año, donde en el medio consiguió clasificarse al Súper 4 cuando el panorama rumbo al torneo parecía un tanto nublado, y además finalizó como líder de la Conferencia Norte en el joven inicio de la segunda fase del torneo.
Y Rodrigo Sánchez sin dudas es una de las grandes claves del éxito de Oberá. El ala pivote, uno de los más dominadores de la Liga Argentina desde hace años y un jugador que año tras año muestra un elevado crecimiento a nivel juego, parte de su reinvención constante y experiencia, es el tercer máximo anotador de la temporada (18.5 puntos de promedio) y es una constante búsqueda en cada ataque del elenco misionero.
"Estamos muy contentos con lo deportivo y con el grupo en sí. Creo que es muy difícil armar buenos grupos deportivos y humanos, y creo que acá se está dando todo", comenzó explicando Sánchez en diálogo con Prensa AdC.
El rosarino es consciente de que el equipo hizo un clic durante las últimas presentaciones, y que esta seguidilla actual de nueve triunfos al hilo no son una casualidad sino más una causalidad de que el equipo entendió que debía sacrificarse y jugar de otra forma para generar un cambio. El Celeste se había mostrado un tanto irregular, porque más allá de que había comenzado con victorias en sus partidos de local no corrió con el mismo éxito en la ruta. Y eso desembocó en la salida de Alejandro Kuperman, entrenador del equipo durante los primeros 7 compromisos.
"Como lo hemos hablado en otro momento, el equipo no estaba mal cuando le tocó irse a Alejandro. Por ahí nos tocó perder 2-3 partidos que habíamos dominado de visitantes pero se nos escaparon al final, si los hubiésemos ganado por ahí la situación hubiese sido distinta. Pero creo que después de eso el equipo hizo un clic en el sentido sacrificio individual hacia lo grupal, entendimos que de visitante teníamos que jugar de otra manera, sacrificarnos más por el equipo, ser más sólidos en defensa. Somos un equipo muy atlético, con jugadores muy dinámicos y tranquilamente podemos hacer el desgaste tanto atrás como adelante. Quedó demostrado en los últimos juegos, porque tanto Ameghino como Parque son dos equipos con goleo muy alto y el equipo le bajó el goleo de la mejor manera, defendimos bárbaro, y nos anotaron 70 Ameghino y 65 en Barrio Parque. El equipo entendió eso, que si se sacrifica un poquito más y que cada uno pone un poquito más, el talento individual que tiene para con el equipo termina haciendo que las cosas salgan bien. Por eso se dio también esto, no es casualidad haber ganado 9 partidos seguidos", reflexionó Rodrigo sobre el giro que dio OTC en las últimas semanas.
Parte importante de este cambio un tanto radical que consiguió Oberá dentro de la competencia fue la llegada de Leandro Hiriart, que volvió al club (ya lo había dirigido en la temporada 2013/14) y, sin quizá tantos entrenamientos por cuestiones de calendario, buscó trabajar y cambiar al equipo desde otro lado. Los resultados hoy pueden verse, con el ciclo del entrenador también rosarino sosteniéndose como invicto (8 victorias sobre 8 posibles con Hiriart al mando).
"A Leo (Hiriart) ya lo conocía de antes, es un entrenador que tiene mucha experiencia en la categoría y es un gran técnico. Si bien no tuvimos mucho tiempo para entrenar con él, porque la realidad es que desde noviembre hasta el receso en diciembre tuvimos una seguidilla de partidos importantes y el equipo no pudo entrenar, fueron muy pocos los entrenamientos que hicimos, pero el cuerpo técnico hizo un trabajo donde más que nada se enfocó en la parte de video y lo táctico, y hablamos mucho de lo que el equipo necesitaba y qué hacer para pasar de ser un equipo bueno a uno muy bueno y así poder dar un salto de calidad. Y creo que lo entendimos todo, y se dio una seguidilla muy buena que nos hizo clasificar al Súper 4, el haber ganado 4 partidos consecutivos de visitante que no es poca cosa y en canchas muy difíciles como Ameghino, Norte y Parque, que creo que son 3 de las canchas más difíciles de la Norte", explicó Sánchez.
Respecto a su presente que lo encuentra nuevamente en un altísimo nivel, el ala pivote rosarino se mostró satisfecho y es consciente que toda su evolución también es producto de un proceso de maduración año tras año.
"Estoy muy contento y feliz de estar en Oberá, el club está haciendo las cosas demasiado bien como para que nos tengamos que preocupar solamente en lo deportivo y yo personalmente tomo cada año como una motivación distinta y un desafío nuevo, y eso hace que cuando empiece la temporada lo haga de la mejor manera y con la máxima motivación para seguir creciendo a nivel individual. Personalmente yo siempre trato de estar al 100%, me siento bien físicamente y más maduro, y eso hace que pueda jugar más tranquilo y entenderme mejor con mis compañeros", manifestó.
No obstante, no pierde el foco de lo colectivo y la clara importancia de que en Oberá se haya confeccionado un plantel con jugadores que en alguna parte de sus carreras coincidieron deportivamente en otros equipos. El caso más notorio es el de Sánchez con Juan Rodríguez Suppi, que la temporada pasada brillaron y fueron los líderes un San Isidro que llegó a las Finales de la Liga Argentina. Ambos volvieron a encontrarse esta temporada en el Celeste, compartiendo nuevamente una sociedad que los transforma en una de las mejores del torneo.
"Obviamente que cuando el equipo está bien y nos va bien a todos es lo más importante, pero también subir el nivel de cada uno, donde creo que este es un equipo súper talentoso, hace que el equipo juegue mejor y nos vaya mejor grupalmente. Cuando se potencia lo individual se potencia lo individual. Que haya venido Juani (Rodríguez Suppi) conmigo a Oberá y que se hayan conjugado jugadores que ya se conocían en un mismo equipo también es muy importante, porque Emi Correa, Lucas Díaz, Maxi Martín y Juani ya habían jugado juntos en Morteros y está claro que eso a la hora de armar un equipo te suma un montón, porque ya tener jugadores que se entiendan y que sepan el estilo de juego o lo que hace el compañero es una ventaja importante", resumió Sánchez.
Prensa AdC