Tras casi diez meses en nuestra ciudad y alejados de las últimas noches de básquetbol en el Gigante, este jueves 25 de junio marcó y guardará la silenciosa partida de los dos extranjeros de Parque Sur. Patrick Smith y León Hampton, hicieron sus valijas y en medio de una mezcla de sentimientos se despidieron del club y Concepción del Uruguay, el mismo día que la ciudad festejaba su cumpleaños en cuarentena.

Smith y Hampton, los dos mejores extranjeros que vistieron la casaca sureña en su participación en la segunda categoría del básquet argentino, partieron este jueves a las 23.50 desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza rumbo a Miami, Estados Unidos, en un vuelo especial de la aerolínea nacional. Los separan 9 horas de avión. Desde ahí, Patrick tomará el destino hacia el estado de Maryland y León rumbo a Birmingham -la ciudad más grande del estado de Alabama-, sus lugares de origen.

Ambos jugadores debieron permanecer en La Histórica estos meses, lejos de sus amigos y seres queridos, debido a la cancelación de los vuelos por la pandemia. Por eso, la despedida de Parque Sur se dio en esta jornada. Este vuelo especial de Aerolíneas a Miami les permitirá el regreso a su país, luego de varios rounds de amor, como dice la canción.

Smith y Hampton dejan una buena temporada en Parque Sur, tras aquella llegada en setiembre del año pasado. El 16 de ese mes entrenaron juntos por primera vez en el Gigante. Patrick había llegado unos días antes que León.

Con lógicos altibajos de la competencia, los dos superaron largamente las expectativas para la que fueron contratados; en el primer torneo que Parque Sur encaró con dos extranjeros de ese país. Smith jugó los 31 partidos de la Liga. Hampton faltó a 3 por una lesión en el hombro. Los dos fueron los goleadores del equipo.

Se llevan esos números: Hampton 321 puntos anotados, Smith 320. Parque Sur extrañará ese goleo pero más los cientos de rebotes que bajaron y el trabajo defensivo. Hasta en eso fueron parejos: 265 León, 269 Patrick. Parque Sur tuvo en la Liga a dos de los principales reboteros y también en León, con sus 2.11 metros, a uno de los mejores en tapas. Lógicamente, terminaron siendo los más valorados del plantel por las estadísticas oficiales.

Pero las cosas más sencillas son las más difíciles de encontrar y las estadísticas no pueden contarlas. Además de lo que dejaron dentro de la cancha, Smith y Hampton se metieron en el corazón sureño y dejaron un sello en el club a lo largo de su estadía, con muchas actitudes destacables, algunas de las cuales fueron marcadas en este proceso: Maratones, torneos de ajedrez, noches de bar frente al piano, música, alentar a los gurises de intermedias en una tribuna, jugar y reírse con los pibes del minibásquet, patear penales en el último torneo de fútbol infantil del club, etc. No es poco todo lo que dejaron en menos de un año. Cuando el tiempo pase, la gente del barrio recordará esos detalles.

Informe: Prensa Parque Sur