Liga Argentina · 30 de Diciembre de 2017
#Super4LigaArgentina: Mano a mano hemos quedado
El Súper 4 ofrecerá en la segunda categoría nacional la chance de ver duelos eliminatorios directos, en los que la revancha no existe. Los experimentados de cada equipo analizan cómo hay que jugarlo y repasan anhelos y recuerdos de torneos internacionales.
Por David Ferrara
El Súper 4 de La Liga Argentina está a la vuelta de la esquina. La atención del básquet nacional estará puesta en Sunchales, donde los cuatro mejores elencos de la primera etapa clasificatoria de la competencia pelearán por el título de apertura de la temporada y por una plaza para la final de la Supercopa, que dará un lugar en la Liga Sudamericana. Toda una experiencia renovada para la categoría, que además llegará al país por DeporTV desde uno de los estadios históricos del básquet nacional, el Hogar de los Tigres.
Habrá una particularidad, ya que los choques serán en duelos directos, eliminatorios, algo que no siempre se da en el básquet argentino, sólo en este tipo de torneos cortos y explosivos de mitad de temporada o las resoluciones de certámenes internacionales. Sin margen de error, sin chance para una mala tarde o mala noche y con la necesidad de replantear urgente alguna situación adversa. Para algunos jugadores será toda una experiencia, para otros un desafío, mientras que algunos pocos ya saben cómo jugarlo, o al menos cómo deberían hacerlo.
Para Agustín Carnovale, escolta y jugador experimentado de Villa San Martín, no es un partido más, porque abre las puertas de una final y porque es de eliminación directa en la carrera por el título del Súper 4: “Lo tomo como un partido único, como una serie de playoffs que va 2-2 y no hay mañana. Hay que llegar de la mejor manera al sábado 6 porque mucho dependerá de ese día. Tenemos un cuerpo técnico que trabaja muy bien y nos da confianza para llegado el día estemos todos al 100%”.
El Negro relata cómo fue la realidad de estos días, entre el descanso por las Fiestas y el deseo de preparar estos juegos. “El parate de las Fiestas nos hace perder un poco de ritmo. Si bien cada uno por su cuenta tiene trabajos para realizar, no es lo mismo que sigamos entrenando en equipo. Pero estamos con muchas ganas de jugarlo. Sabemos que es una oportunidad única y la queremos aprovechar”, cuenta el rosarino, quien también explica cómo incidió esta clasificación en la vida institucional del elenco de Resistencia: “También para el club es muy importante. En su segundo año estar jugando un torneo que te da una chance de jugar una Liga Sudamericana es increíble. Me da mucha satisfacción que Villa San Martin pueda jugar este Súper 4. La gente nos acompaña y nos apoya y eso a uno lo llena de alegría y de ganas de seguir adelante y haciendo cosas buenas para todos”.
Desde lo personal, a pesar de sus años en Sionista de Paraná, a Agustín Carnovale le tocó irse de la institución justo en el año en el que compitió en el torneo internacional, de modo tal que lo mira a futuro como una mini revancha: “Nunca tuve la posibilidad de jugar la Sudamericana. Así que sería un gran premio en mi carrera y al esfuerzo que uno hace temporada tras temporada”.
Villa San Martín jugará ese sábado 6 de enero desde las 18 ante Deportivo Viedma, que a kilómetros y kilómetros de distancia, lo vive de la misma manera. Sino, que lo cuente su símbolo, Pedro Franco. “El equipo está muy bien, muy motivado por tener la oportunidad de poder jugar una Copa, algo que nunca había pasado en esta categoría y estamos ansiosos, con muchísimas ganas de jugarla y de ganarla”, se sincera el conductor del elenco sureño quien afirma: “Estamos muy bien preparados y llegamos en un momento bárbaro del equipo”.
“Este no es un club normal, es muy joven y comenzó con un proyecto ambicioso que fue avanzando. Nos ganamos un nombre en la categoría y cuando arrancamos nadie se esperaba que lleguemos a este torneo, que es bárbaro y es un premio. En toda la zona es una revolución saber que vamos a jugarlo”, amplia Franco, quien también da su mirada de esto de jugar sin red ni chance de revancha: “Jugué partidos de eliminación directa pero no en esta categoría y es obligatorio estar muy concentrado en cada pelota. A esta altura de mi carrera tener este desafío es algo espectacular. No me quedo con eso, con la experiencia que vamos a vivir, sino que sueño con salir campeón, porque aunque sea en Sunchales, estoy jugando en mi casa, con mi gente, porque representamos a toda una región”.
Por su parte, el dueño de casa tiene juventud pero también experiencia en el plantel. Y uno de los que puede hablar largo y tendido sobre duelos eliminatorios y torneos internacionales es Ariel Zago, interno de gran recorrido que regresó al Tigre de Sunchales.
“La temporada del equipo fue muy buena. Si bien es verdad que no terminamos de la mejor forma los últimos partidos de la primera fase, en ese momento como ya estábamos clasificados se le dio prioridad a la recuperación de algunos jugadores y a lograr una mayor rotación. Lo veo bien al equipo, le falta para llegar a su techo y brindar su mejor versión, pero trabajamos para eso”.
“A inicio de temporada trazamos objetivos cortos y luego apareció lo del Súper 4 y fuimos un poco más ambiciosos y nos propusimos entrar. Para el club es muy importante que después de bajar a la categoría se vayan dando estos objetivos y mantenerse competitivo”, explica el lungo chaqueño, quien también lo ve como un desafío personal: “Para nosotros también es importante, un lindo desafío. ¡Quién no sueña poder lograr la clasificación e integrar a futuro el equipo para disputar la Liga Sudamericana!” ...
Y Zago también se refiere a las características del mano a mano, en el que ganar es lo único importante: “En este tipo de partidos en los que para seguir hay que ganar, no se puede reservar nada, hay que apostar a ser agresivos defensivamente para sostener si ese día no hay una buena eficacia ofensiva. Porque hay días y días. Entonces es importante mantenerse en juego con la defensa. Y si se logra avanzar quizás al otro día es todo historia nueva y tenés una ofensiva letal. No se puede reservar nada, creo que en lo actitudinal: compromiso y querer ser vencedores no se negocia. Podés tener una mala noche pero la energía debe estar volcada al 100% en la cancha”.
“Para nosotros sería un lindo premio para el grupo, para sumar a los logros de cada uno de nosotros y también para el club, que de hecho organizan el evento porque se muestra muy entusiasmado y con ganas de conseguir la plaza sudamericana, así que estamos en conjunto buscando y peleando por lo mismo”, amplia Zago, quien además tiene experiencia en competencias internacionales en su anterior paso por el club: “Participé de dos Ligas Sudamericana con Libertad, el primer torneo jugué poco porque recién me iniciaba. Y en la segunda se consiguió el campeonato de La Liga Sudamericana y me tocó ser más partícipe. Tengo muchos recuerdos, experiencias, viajes, conocer nuevos países, canchas, jugadores, medirse con estrellas de otros países en nuestro deporte. Obvio, fue muy lindo ser campeones y trajo a la ciudad e hinchas de Libertad unos de los primeros festejos. Fue algo único, que al recordarlo, te dan ganas de volver a vivirlo y más en mi caso en Sunchales donde me vieron crecer y donde tengo muchos amigos. Así que después de tanto tiempo, 11 años, volver a tener la chance de poner en ese lugar al club de nuevo sería muy lindo, algo increíble de sólo pensarlo”.
Desde las 20, la segunda semifinal tendrá a Libertad frente a Platense, otro de los elencos que dejó su huella en la primera etapa de la competencia y que tiene en sus filas a otro experimentado batallador de la zona pintada, Ariel Eslava.
“El equipo está muy bien. Terminó una primera fase excelente y en la última gira nos llevamos un partido importante con Patagones y ante Viedma se perdió en suplementario. Ha sido positivo, con localía fuerte y lo que perdimos como visitantes fue en partidos de final cerrado o tiempo extra”, cuenta Eslava, quien todavía ve muy lejos la plaza en la Liga Sudamericana y prefiere ajustar la mira en el mano a mano ante Libertad: “Afrontamos este torneo con mucha ilusión, intentando poner a Platense en el lugar que se merece, que son los primeros planos de la competencia. Falta mucho para definir la plaza por la Sudamericana. Pensamos primero en el primer partido, que va a ser complicado”.
Y acto seguido explica cómo hay que tomar este tipo de duelos: “La realidad es que hay que disputar el primer juego como si fuera la final o te quedás afuera. Hay que jugar al 110 % para poder pasar el cruce y estar en la definición”.
A pesar de mirar la Liga Sudamericana todavía de reojo y querer ir paso a paso, Eslava recuerda sus anteriores desafíos a nivel internacional: “Jugué con Boca la final de la liga Sudamericana en el 99 y con Lanús Liga de las Américas. En la primera era chico, fue en el Maracanazinho ante 11 mil personas y el Vasco da Gama de Byrd y Vargas. Fue una linda experiencia a pesar de la derrota. Con Lanús jugamos en Montevideo, con Aguada, que tenía una localía increíble y contra un García Morales imposible de parar”.
Igual Eslava no puede con su genio y reitera: “Igual, aunque cuente esto, falta mucho. Debemos y tenemos que pensar en el primer partido del Súper 4”.
Duelos directos, historias de juegos internacionales, desafíos que llevan en la espalda a ciudades enteras. Es grande lo que estará en juego en apenas unos días en Sunchales.
*David Ferrara fue productor periodístico de las transmisiones televisivas del Torneo Nacional de Ascenso durante diez años. Periodista del diario El Ciudadano y La Capital, de Rosario. Docente en Tea Rosario y en Ieserh Rosario. En Twitter @davidferrara35