Fue un partido con total dominio naranja, en el cual el local manejaba la ventaja desde el primer tiempo tras un excelente segundo cuarto (31-14). Luciano Silva fue una de las piezas claves del momento, quien estuvo intratable desde el perímetro (17 puntos, 5 triples). En el equipo de Tucumán, tuvo una buena noche Patricio Aranda quien castigó desde distintos sectores (13 puntos).

 

El escándalo se desató a falta de 7 minutos y 48 segundos para el final del encuentro. Después de una antideportiva de Echevarría sobre Andrés, comenzó un cruce de palabras. Cravero intervino para separar pero rápidamente corrió Muruga y le dio a Cravero un golpe en la garganta por detrás, lo que desató el caos. Jugadores de ambos equipos que estaban en el banco de suplentes ingresaron para separar, lo que provocó que los descalifiquen.

 

Luego de más de 40 minutos y que la terna arbitral revisara una y otra vez el video, tomaron la decisión de descalificar a 15 jugadores (7 de Tucumán y 8 de Rivadavia). De esta manera, cada equipo quedó con 3 jugadores para disputar el cierre del partido. En el naranja, los tres más juveniles: Minelli, Buenanueva y Vélazquez; mientras que en la visita Barrionuevo, Echeverría C. y Mondino.

 

No se sacaron diferencias en los minutos finales, y los juveniles de Rivadavia supieron mantener la ventaja. Finalmente, fue triunfo del equipo de Mendoza por 88 a 65 para sumar así, su tercera victoria consecutiva.

 

Informe: Prensa Rivadavia Básquet

Foto: Gimena Cornejo/Salto Inicial