San Martín hizo un gran segundo tiempo en defensa solo permitiendo 24 anotaciones en su aro. Así desniveló lo que había sido un juego equilibrado en el primer tiempo -43 iguales-. Ganando por la mínima, metió una notable carrera de 17 a 0 en el último cuarto que lo consolidó 81 a 63 al frente.

Garello con 17, Méndez y Pérez Tapia con 15 y Gargallo 11, fueron los mejores anotadores del ganador. En el local Alonso, Eidintas y Guerra aportaron 13 y 12 Robinson.

Los momentos donde uno podía encontrar eficacia con el tiro de tres puntos fueron todo un termómetro en el primer tiempo. San Martín fue el primero en beneficiarse con esa situación de la mano de Méndez en el primer cuarto para despegar 23 a 16 y llegar a tener un 26 a 18. La Unión achicó en el cierre del capítulo con un personal 4 a 0 de Pérez (26 a 22).

En el segundo iba a ser La Unión el más certero a distancia y con un triple de Pérez empató en 27. También con aciertos de tres, los de Ginóbili tuvieron su mejor momento en la noche con aciertos por esa vía de Eidintas (32 a 29) y Guerra (35 a 30)

Largaron el segundo tiempo igualados en 43 y el parcial de 16 a 12 para San Martín era toda una señal, sobre todo de preocupación para el local por sus problemas para anotar. Ya sin éxitos de tres y sin puntos cerca del aro de sus internos, se comenzó a ver en problemas que en el último cuarto se sostuvieron, con el agregado de los inconvenientes para contener el ataque rival.

En 1,30 minuto del parcial final, San Martín lastimó con dos triples -64 a 57- para un 6-0 que le daba seguridad. Con Alonso y Cardo (un triple cada uno) respondiendo con otro 6-0, La Unión se puso a la mínima, pero lo que siguió fue una ola de anotaciones en un solo cristal: 17 a 0 para el elenco correntino que lo disparó 81 a 63 con menos de 3 minutos en el reloj poniendo por completo las acciones a su favor.

En el juego correspondiente al tercer y cuarto puesto, el Villa San Martín venció a Comunicaciones de Mercedes, por 92 a 82.

El trofeo se fue para Corrientes, entregado a Gastón García por la familia de Martínez Flores, ya que estuvieron su esposa, hijos, nietos, incluyendo a Mario Martínez, asistente de Sebastián Ginóbili, unos de los hijos del “Negro Costa Rica” como lo conocieron todos en el ambiente del básquet.

Informe y fotos: Prensa La Unión.