La última temporada fue una larga agonía para Atenas, aunque el triunfo en la batalla por la permanencia frente a Bahía Basket le permitió esquivar el descenso y al menos le sacó una sonrisa. En Córdoba esperan que la campaña quede apenas en un mal recuerdo, en un recuerdo triste para un gigante que caminó sobre la cornisa. El equipo más ganador de la Liga Nacional está dispuesto a dar un paso adelante y empezar con su reconstrucción para volver a ser el temible conjunto que supo ser un candidato permanente hasta hace una década. 

El Griego, que conquistó el último de sus nueve campeonatos en 2008/09 y disputó su última final en 2010/11, movió sus piezas y tomó decisiones drásticas con la ilusión de empezar a encauzar a un equipo perdido durante los últimos años. La primera gran decisión fue la contratación de Sebastián Saborido como coach, uno de los entrenadores que más ha evolucionado durante los últimos años. 

Casi sin nombres propios de la campaña anterior, el elenco cordobés reseteó su estructura para moldearse de acuerdo al nuevo entrenador y su libreto. No será una campaña fácil para Atenas, que movió muchas piezas y necesitará encontrar su nueva dinámica, pero sin dudas la elección de Saborido es un primer paso importante para reencontrarse con su estirpe histórica. 

Sebastián Saborido

Más allá de la elección de los nombres propios para la conformación de un plantel, cada vez cobra más relevancia la presencia de un buen entrenador en un básquet -en un deporte en general- cada vez más estudiado. Saborido se ha ganado durante el último lustro un lugar en la Liga Nacional como uno de los mejores y más interesantes coaches del ámbito local. 

Tras cuatro años al frente de Libertad, una exitosa era en la que ganó la Liga Argentina, consumó su ascenso a la Liga Nacional y mantuvo a su equipo siendo competitivo pese a un presupuesto muy limitado, Saborido decidió cambiar de aires una vez vencido su vínculo contractual con el combinado de Sunchales. El desafío de dirigir "al equipo más importante de Argentina", como el mimso definió a Atenas, golpeó su puerta y no lo dejó pasar. Para Saborido es una oportunidad única y, si consigue devolver al Griego a sus días de gloria, se convertirá en una leyenda en Córdoba y en la Liga Nacional. 

"En lo personal es un tremendo desafío como entrenador. Por lo que charlamos con Bruno (Lábaque) quiere empezar a reconstruir y revalidar su historia de a poco. Es un momento de construcción y de tiempos en los que ellos quieren superar esta etapa compleja. Tenemos que llevar a cabo algunas reuniones con Bruno todavía. La idea claramente es mejorar. Atenas tiene solamente a Rossi con contrato. Más allá de nombres que ya hayan salido a la luz todavía hay encuentros pendientes. Hay que diagramar en función al presupuesto y a los objetivos", había dicho al anunciarse la noticia. 

Saborido aterrizó en Atenas y empezó a moldear al club, al plantel, de acuerdo a su gusto personal, con el objetivo inicial de forjar un equipo competitivo que pueda jugar de igual a igual a todos los integrantes de la Liga Nacional. El Súper 20 será un buen banco de pruebas. Esta renovada versión de Atenas intentará explotar al máximo las características de sus jugadores, con un estilo dinámico, solidario en ataque y fuerte en defensa. 

Cuerpo técnico:

• Asistentes técnicos: Claudio Arrigoni y Nicolás Arduh
• Preparador físico: Martín Carrizo
• Médico: Eduardo Giacosa
• Kinesiólogo: Gabriel Guerrero
• Psicólogo: Gustavo Mena
• Utilero: Gustavo Albarracín
• Jefe de equipo: Ricardo Borsini

Altas: Sebastián Saborido (DT), Diego Gerbaudo (Peñarol), Latraius Mosley (Libertad), Daniel Hure (Libertad), Eduardo Gamboa (La Unión), Augusto Alonso (Libertad), Jonatan Basualdo (Tiro Federal de Morteros), Omar Cantón (Sportivo América), José Familia (Cimarrones, Colombia) y Laureano Zalio (Central Ceres).

Bajas: Lucas Machuca, Leonardo Lema, Federico Mansilla, Pablo Bruna, Matías Martínez y Tomás Rossi. 

Siguen: Gastón Córdoba y Maximiliano Araujo.

Después de una campaña con más tristezas que alegrías, Atenas realizó cambios estructurales importantes en su fisonomía. El primero fue la contratación de Sebastián Saborido, uno de los entrenadores más interesantes de la Liga Nacional, que fue elegido después de su gran campaña en Libertad de Sunchales. Seleccionado el entrenador, Saborido fue fundamental en el armado del nuevo Griego y para su versión 2021/22 sumaron a tres jugadores del riñón de su flamante coach: tanto Augusto Alonso como Latraius Mosley -una de las revelaciones de la última Liga- y Daniel Hure se mudaron de Sunchales a Córdoba. 

Resonante fue la incorporación del experimentado Diego Gerbaudo, quien será uno de los encargados de dirigir a las huestes de Atenas en una tarea que se repartirán con el recién incorporado Eduardo Gamboa en un doble comando que deberá repartirse las tareas de conducción y anotación. Mauro Araujo y Gastón Córdoba son los únicos dos que continúan del proceso anterior después de la desvinculación de Tomás Rossi, quien será baja debido a una lesión en uno de sus pies.

También será importante la presencia de Omar Cantón, quien cumplirá una doble función como apoyo en el poste bajo y será una amenaza desde el perímetro gracias a su tiro de tres puntos. El dominicano José Familia, quien fue contratado de urgencia por la baja de Rossi y los contratiempos que sufrió Kenny Hill, reforzará la zona de internos en yunta con Cantón, Hure y el también incorporado Zalio.