Informes Especiales · 02 de Mayo de 2020
Libertad, título y ascenso de un histórico en la 97/98
Libertad de Sunchales ganó dos títulos en el ascenso en lo que va de estos 35 años de Liga. El primero, en la temporada 1997/98 y de la mano de Gonzalo García, fue el puntapié inicial para fabricar más adelante una etapa de supremacía y reconocimiento que lo transformó en uno de los más emblemáticos de nuestra historia.
Por Lucas Leiva
Libertad es uno de los grandes clubes dentro de la historia de la Liga Nacional. Uno de los grandes emblemas de la liga, que labró toda una época dorada a través de un periodo exitosísimo que hasta incluso trascendió fronteras, siendo campeón en el certamen local con La Liga y también compitiendo a nivel internacional donde se consagró en dos oportunidades con la Liga Sudamericana.
Pero claro, antes de todo este palmarés que enaltecen el trabajo de toda una institución icónica existe un pasado que debemos recordar. Y en esta oportunidad, vamos a volver un poco a ese momento previo, a uno de sus recuerdos más gratos en sus comienzos a nivel nacional: la temporada 1997/98 del TNA.
Los Tigres coronaron un año brillante en aquella campaña, en la cual fueron campeones de la categoría consiguiendo el ascenso a la elite. De la mano de Gonzalo García como entrenador, Libertad dio el gran salto.
"A veces uno se va para atrás y recuerda cosas muy claras, o viendo periódicos. Pasó tanto tiempo pero a su vez también es fácil recordar todo lo que pasó ese año, porque pareciera que hubiese sido ayer todo lo que se vivió con Libertad ese año", rememora Mariano Ceruti, uno de los valores importantes que tuvieron los Tigres.
Si bien ya había participado un par de temporadas en el segundo escalón cuando todavía se encontraba la Liga B (antes de la creación del TNA), el mejor resultado en ese entonces había sido un séptimo puesto en 1989. Con la aparición del Torneo Nacional de Ascenso, participó de las tres primeras ediciones de 1992/93, 1993/94 y 1994/95. Bajó a la Liga C en la 1995/96 tras intercambiar su plaza con Ben Hur de Rafaela, y de inmediato regresó a la segunda división tras lograr el ascenso.
De vuelta en el TNA, en la 96/97 terminó séptimo, y en la siguiente concretó un sueño: campeonar en la categoría y subir a lo máximo, la Liga Nacional. Todo este proceso, de dos ascensos prácticamente de forma consecutiva, los logró con García al mando. Aquel 18 de mayo de 1998 se escribiría una de las páginas más gloriosas de la historia del club, tras ganar el quinto partido de la final contra Siderca de Campana.
El plantel campeón de aquella inolvidable temporada estuvo conformado por Miguel Barbieri, capitán del equipo; Fabián el Mofle Horvath; el extranjero Malru Dottin; Gerardo Corroto; Jorge el Chino Benítez; Sebastián Porta; un muy joven y prometedor Bebo Ceruti, ídolo de la institución; Gustavo Lucato; Martín Chiavassa; Fernando Bortolotti; Hernán Faletto; Sebastián Riboldi; y Diego Bocco.
"Cuando pienso en Libertad, lo primero que se me viene a la cabeza es el calor que sentí cuando apenas me fui a mudé a Sunchales (risas). Los bomberos tiraban agua en el techo del estadio para que baje un poco la temperatura cuando jugábamos en Sunchales el verano de esa temporada", recuerda Horvath como una pequeña anécdota.
La temporada arrancó con victoria contra Central Entrerriano de local en Sunchales, y ya con dos valores destacándose como el Chino Benítez y el Bebo Ceruti en el apartado del goleo. A partir de ahí comenzó a labrar un importante camino dentro del calendario, que luego desembocaría en los playoffs.
Ya en playoffs, y con ventaja de localía, eliminó a Echagüe de Paraná en cuartos de final por 3 a 1 (triunfos por 74-61 y 74-52 en Sunchales, derrota por 67-63 en tierras entrerrianas; y victoria final de visitante en el Juego 4, en Paraná y por un emotivo 80-78). El Bebo Ceruti anotaría 24 puntos aquel épico cuarto juego ante Echagüe en el Butta.
Luego llegaría Estudiantes de Santa Rosa en semis, una serie que también se iba a definir por 3 a 1 con la misma modalidad: cerrar la llave en recinto ajeno. Fueron 85-73 y 73-51 los primeros dos en Sunchales, luego caída en el tercer partido por 102-73 ya con la serie en suelo pampeano, y finalmente triunfazo por 73-68 en el cuarto partido, con 20 puntos de Corroto.
"Teníamos un equipo con muchísima calidad ese año del ascenso, con Gonzalo García que es reconocido uno de los entrenadores más ganadores de la historia, también estaban Bebo Ceruti que después tuvo una tremenda carrera y está muy identificado al club, y chicos como Seba Porta que está de asistente en Libertad y (Gustavo) Lucato que también está como entrenador", agrega y remarca el Mofle.
Llegó entonces la definición del torneo, ante un Siderca que venía en un momento brillante también. Los de Campana venían con un plantel muy bueno, con aspiraciones, y de hecho todavía en la ciudad recuerdan aquella final contra los sunchalenses, cuando estuvieron a un paso del ascenso. La gloria iba a quedar solo para uno, y Libertad fue quien se llevó todo.
De la mano de Ricky Palacio, Siderca tenía jugadores como el extranjero Frederick West, Pedro Casermeiro, Juan Manuel Locatelli, Walter Guiñazú, Hernando Salles, Nelson Ingles, Gerardo Barrera, Roberto Schramm, Mariano Di Lallo, entre otros. Las finales arrancarían el 9 de mayo, en suelo santafesino.
El ganar las anteriores dos series de visitante le dieron a Libertad el último empujón de carácter que necesitaba y pudo mostrar en la gran final. Por tal motivo, con ventaja de localía y ya entonado por el campañón que venía haciendo, los Tigres dieron el zarpazo inicial llevándose los dos primeros juegos en casa, primero por 79-77 (25 puntos de Ceruti, 23 de Malru Dottin y 16 de Benítez) y luego por 67-65 (21 de Dottin, 19 de Ceruti y 14 de Corroto).
Con la llave mudándose a Campana, Siderca levantó doble match point en contra y ganó tanto el tercer como el cuarto partido. Ganó 75-64 primero (29 de Dottin y 19 de Ceruti), y luego empardó las finales con un gran 72-69 (20 de Corroto, 14 de Ceruti, 12 de Dottin y 11 de Benítez). La apasionante definición se fue un quinto y decisivo encuentro, de regreso a Sunchales.
Y allí Libertad no perdonó. Ya había estado al borde de dar el golpe en el anterior juego en Campana perdiendo por apenas un triple, y en Sunchales la historia se escribió nuevamente con muchísimo suspenso. Un triple que no entró para Siderca y Libertad capturando esos rebotes que quemaban, parte de un final tremendo, con unos libres clave para ir sentenciando la historia a favor del cuadro de García, terminaron desatando el festejo por 79-75 (24 de Dottin, 17 de Corroto y 14 de Benítez). Victoria por 3 a 2, título y ascenso para un épico Libertad.
"Fue una noche inolvidable ese quinto partido, con gente afuera esperándonos. Fue un honor haber sido parte de aquella contienda y evento para nosotros. Sobre todo aquellos que estamos hace muchos años en el club, lo queremos y en definitiva en algún momento ya hace casi 30 años en mi caso que nos enamoramos de este club, y de esta tremenda y hermosa ciudad que hemos elegido, incluso para criar a nuestros hijos", recuerda el capitán Barbieri.
Particularidades si las hay, dentro del cuerpo técnico estaba Eduardo Chicho Grosso, quien hasta el año pasado fue presidente de Libertad y que era el médico de aquel plantel de la 97/98; mientras que Barbieri, capitán de ese plantel campeón, cubre funciones como nuevo presidente de la institución desde el año pasado y al día de hoy.
Este año se van a cumplir 22 años de aquel título. Dicho plantel siempre tendrá una fuerte identificación con Libertad, ya que varios de esos jugadores habían surgido de las inferiores del club y residen en Sunchales incluso en la actualidad. Ese 18 de mayo quedará en el recuerdo y en la memoria de toda la ciudad.
Después claro llegarían otros títulos muy grandes como las mencionadas Ligas Sudamericanas (2002 y 2007) o el título de Liga Nacional en esa temporada arrasadora de la mano de Julio Lamas (2007/08), pero esta gran alegría en el TNA tampoco se podrá olvidar, más recordando que el equipo venía de ascender a esta categoría dos años atrás y que en su momento se había dudado de su participación hasta la aparición de un sponsor que lo hizo posible.
Informe: Prensa AdC Foto: Gentileza Sunchales Hoy