Lanús debutó con una sonrisa en el Clausura

Anhelaba reinsertarse en la ruta, en ese sendero de competencia, tras un extenso periodo de remanso. Movilizado en la adrenalina de volver al ruedo, Lanús experimentó una noche con cierta carga emocional, que se configuró en el deseo de ratificar todos los comportamientos positivos de la anterior etapa.

Con todos esos condimentos en el aire, el Granate realizó su estreno en el Torneo Clausura en su casa y logró domar sus ansiedades para doblegar 70-62 a La Unión de Colón, en un cotejo correspondiente a la Fase Regular de la Zona A de la Conferencia Sur.

El elenco de Sebastián Saborido disimuló la rotación corta, tras la salida del extranjero Matthew Dade y la lesión de Alejo Sacchi, y encontró en Augusto Alonso al jugador más productivo de la velada con 18 puntos (6/10 de cancha), 6 rebotes, 2 asistencias y 3 recuperos. Además del aporte de Sebastián Chaine con 10 unidades y 8 rebotes. En el rincón de los entrerrianos sobresalió Matías Caire con 18 tantos y 5 recobres.

⏱️ Entretiempo en el Rotili con ventaja de 33-29 a favor de @clublanus sobre @launiondecolon

🏹 Tras varios rebotes ofensivos, Scacchi castigó de larga distancia

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— Basquet Pass Argentina (@basquetpass_arg) January 16, 2025

El duelo se inició bajo los influjos de las imprecisiones, típicas por la prolongación del receso, por eso la efectividad se convirtió en la gran ausente en el parquet (1/8 en triples para el local y 5/13 de campo para el Rojo). Gago (5) aportó en el dueño de casa, mientras que Cabrera (6) trajo aire desde el banco para la visita. Así, el segmento se clausuró con una leve renta 17-15 de La Unión.

En el segundo capítulo, Lanús tomó una pequeña ventaja 24-19, alimentado en las resoluciones de Scacchi (7) y Chaine (6), a los 4 minutos. Los desajustes defensivos fueron moneda corriente, aunque ninguno de los dos contendientes le sacó jugo a esas desatenciones. Los visitantes maquillaron un periodo magro con un triple sobre el final de Giménez para retirarse abajo 33-29.

Tras las charlas en vestuarios, el Rojo revirtió el tablero, en el que mayoritariamente transitó por debajo, con un triple y falta de Giménez y se puso 42-41, a falta de 4:30 minutos. Augusto Alonso (9) asumió responsabilidades y facturó de diversas vías para que el episodio culminara 53-47 para el Grana.

Lanús daba la sensación de gestionar el ritmo del trámite, pero le costaba marcar brechas considerables en el último cuarto. Las inconsistencias continuaron latentes en el partido, con una exigua calidad en la puntería de los lanzamientos. El Rojo amagó con discutir el dominio al acercarse 60-56, con 4 minutos en el reloj. Empero, una bomba de Augusto Alonso provocó la máxima 67-58, con 1:10 minutos por jugar. Desde ese punto, el Granate conservó la calma y cerró el triunfo.

Informe y fotos: Prensa Lanús